La gripe A afectará al doble de gente que la estacional, pero será más leve
El mejor remedio contra la nueva gripe A, la cordura. Y, entre tanto, alarmismo generado por la presencia continuada de este virus en los medios de comunicación. Ayer el consejero de Sanidad de Lakua, Rafael Bengoa, compareció para dar cuenta de su plan de actuación ante el previsible aumento de casos en otoño. Calculó que se contagiará el doble de personas que en una gripe estacional, aunque insistió en que se trata de un virus más leve y llevadero.Joseba VIVANCO |
Lleva camino de convertirse en el culebrón del final de las vacaciones y, por desgracia, también del próximo otoño. Y a pesar de titulares periodísticos y aperturas de informativos televisivos, la mejor prevención contra la nueva gripe A sigue siendo la cordura. La calma y seguir las mismas y simples recomendaciones que se hacen con cada gripe anual. Y si somos víctima de ella y no presentamos ningún problema de los llamados grupos de riesgo, pues como bien dice el refrán, la gripe dura siete días con tratamiento y una semana sin él.
La presión mediática -que ha sustituido los casos iniciales por los más alarmistas fallecimientos, aunque sean con cuentagotas- está obligando a los responsables sanitarios a posicionarse y avanzar las medidas que se tomarán de cara a los próximos meses de otoño.
Ayer lo hizo el consejero de Sanidad de Lakua, Rafael Bengoa, quien dio cuenta del plan de actuación ante esta nueva gripe, al que se destinarán 15 millones de euros, de los cuales 10 irán destinados a la compra de la nueva vacuna aún en proceso de experimentación.
Estamos ante un «virus imprevisible», se apresuró a argumentar Rafael Bengoa, si bien por lo que se sabe hasta ahora es menos grave que los virus gripales de cada año. Por ejemplo, en Gran Bretaña suman cientos de miles de casos y sólo 30 muertes; en EEUU, con un millón de afectados, solo 302 fallecidos; en Argentina, con la elevada tasa de infectados que hubo hace unos meses, registraron 350 muertes. Si tenemos en cuenta que en el Estado español mueren cada año unas 8.000 personas por causa de la gripe estacional, parece evidente que estamos ante un virus menos incivisvo que los ya conocidos.
Sí es cierto, por contra, que su capacidad de contagio es mucho mayor, como se ha constatado desde su aparición en Méjico. Por ello, la previsión que maneja Osakidetza es que la población afectada por gripe este año sea el doble de la habitual. Sanidad maneja un cálculo de unos 2.500 afectados por cada 100.00 habitantes, cuando la campaña con más tasas de incidencia, la de 2001-2002, fue de 1.000 casos por 100.000 ciudadanos. Hasta la fecha, en la CAV se han registrado 66 casos, siendo seis los ingresos en la UCI.
Estamos en la fase cero de la incidencia y el nivel de alerta máxima está fijado para cuando se alcancen los 2.000 casos por cada 100.000 habitantes. Sin embargo, las medidas están ya sobre la mesa, porque, según defendió Bengoa, «no se puede ser complaciente». La actividad gripal en las últimas semanas se ha mantenido a la baja, aunque es previsible, dijo, un repunte en setiembre y octubre.
60 millones de mascarillas
Así las cosas, ha quedado ya activada una mesa interdepartamental y un grupo de trabajo de respuesta sanitaria. Además, los planes de contingencia de los centros sanitarios están puestos al día y habrá un sistema de vigilancia a través de los médicos centinelas, prácticamente como ya se hace con la gripe normal.
Una novedad añadida es que se ha contactado con los Colegios de Médicos y las escuelas de Enfermería en previsión de que se necesitara incorporar personal jubilado de médicos y enfermeras o estudiantes de último curso.
Lo que sí avanzó Rafael Bengoa es que su departamento dispone ya de 350.000 antivirales -no confundir con la vacuna, y mucho menos efectivos-, 60 millones de mascarillas -que ha quedado probado que apenas tienen efectividad alguna y tienen más de tranquilizadores que otra cosa- y 25 millones de pares de guantes.
Al cole, en las fechas previstas
Las otras cuestiones que reveló el titular de Sanidad tuvieron que ver con una preocupación que va en aumento ante el inminente comienzo del curso escolar. El departamento de Educación no tiene intención de variar la fecha en la que los escolares regresan a las aulas y un hipotético cierre de éstas o de colegios se decidirá en función de la incidencia del virus, sin olvidar que en los países del hemisferio sur no ha sido necesario adoptar medidas especiales.
Nada que ver con la medida adoptada en la vecina Nafarroa, de acceso escalonado al curso escolar. Precisamente, ayer, la consejera de Salud, María Kutz, compareció para aclarar que el previsible aumento de carga asistencial médica ante la gripe A está asegurado, aunque pidió la colaboración de los profesionales sanitarios.
Lo hizo tras reunirse con el Sindicato Médico de Navarra, cuyo secretario, Juan Carlos Sánchez de la Nava, avanzó que se han previsto situaciones de aumento de carga asistencial, que se afrontarán con medidas como las de doblar turnos de trabajo, contratación temporal y, llegado el caso, contrataciones de personal fuera de servicio.
De cualquier modo, el próximo 31 de agosto habrá en Madrid una reunión convocada por el Ministerio de Sanidad para poner en común las medidas puestas en marcha en cada territorio, entre ellas la discutida situación de los centros educativos y que ya en el vecino Estado francés se cerrarán cuando se llegue a un número de casos.
El consejero de Salud de Lakua, Rafael Bengoa, avanzó ayer que la futura vacuna, que los laboratorios prueban a toda velocidad, podría estar disponible para octubre y que de ella se verá beneficiada el 30-40% de la población de la CAV. No hay una decisión definitiva sobre quiénes serán sus receptores, pero sí se sabe de sobra cuáles son los grupos de riesgo y, probablemente, quienes serán vacunados: la población infantil de 6 a 24 meses, las embarazadas, la población de 24 a 64 años con enfermedades crónicas, las personas mayores de 65 años y el personal de los servicios en contacto con gente infectada por el virus.
¿El resto? Pues, pese a que menores y jóvenes son uno de los grupos de edad más «susceptibles» de contagiarse, se está viendo que la «pasan bien» si no tienen ninguna enfermedad de riesgo añadida. Es más, la gripe A se trata de un virus menos virulento e igualmente sobrellevable para quien se vea afectado. Las recomendaciones de lavarse las manos, no toserle a nadie, no tocarse la nariz con las manos o taparse la boca al estornudar, son las medidas de precaución de toda la vida y las más efectivas para frenar el contagio. Lo de no besarse que aconsejaban algunos, una solemne estupidez; contagia más un apretón de manos que un beso.
No hay tratamientos preventivos -ni siquiera el manido zumo de naranja- y hasta el uso de los conocidos antivirales oseltamivir o el zanamivir tienen limitado efecto más allá de reducir en algún día el proceso gripal.
Todo apunta a que hay que relativizar cualquier alarma por esta nueva gripe y tomárselo con paciencia. Otra cosa bien distinta son las incógnitas que están rodeando a la producción de las futuras vacunas contra este virus. Los grandes laboratorios farmacéuticos la están probando a marchas forzadas, organismos de vigilancia sanitaria como la FDA estadounidense ya ha dicho que será flexible en su evaluación, la OMS ha advertido que esas prisas pueden suponer riesgos, el recuerdo de los graves efectos secundarios registrados tras la vacunación masiva en EEUU en 1976 contra una gripe parecida...
Ayer, Rafael Bengoa subrayó que su departamento está «obsesionado» con la «seguridad de la vacuna» y que relizarán sus propios análisis antes de suministrarla. ¿Qué análisis que no se hayan hecho? Con este panorama, ¿debemos vacunarnos? Una pregunta que algunos dejan ya en el aire y que será decisión de cada cual. J.V.
El departamento de Sanidad de Lakua ha habilitado la web www.euskadi.net/gripe, ya en funcionamiento, y el teléfono 900 474732, a partir de setiembre, para facilitar información y aclarar dudas a la ciudadanía
La media de edad de los afectados por el virus hasta ahora en Hego Euskal Herria es de 35 años y la estancia de hospitalización fue de unos 4-5 días. Sólo diez enfermos han tenido que pasar por la UCI
El consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, insistió en que el lavado de manos, hasta diez veces al día, con agua y, no olvidar, jabón, es la medida más eficaz para frenar los contagios. Las mascarillas, admitió, tienen un efecto dudoso
El próximo 15 de setiembre comenzará la vacunación contra la gripe estacional de este año. Una campaña que, según el consejero, «sigue su curso normal», y cuya vacuna no es efectiva contra el nuevo virus