Razón
Los aires del «cambio» de López y Basagoiti llegan ahora al muy evidente terreno de las subvenciones públicas en las tres provincias. La primera medida, como no cabía esperar otra cosa, ha sido hurtar la exigua ayuda económica que recibía Torturaren Aurkako Taldea. ¿La razón? Es tan obvio el caso que da vergüenza escribirlo. Pregunten al relator especial de la ONU.
OLASO