Reconocimiento oficial en Irán e Irak al fallecido líder chií Abdel Aziz al-Hakim
GARA |
Cientos de iraníes se reunieron ayer ante la Embajada de Irak en Teherán para despedir al líder chií iraquí Abdel Aziz al-Hakim, fallecido la víspera como consecuencia de un cáncer.
«Simbolizaba todo el sufrimiento de la lucha contra la tiranía», declaró el Líder Supremo de la República Islámica, Ali Jamenei, en un mensaje que se leyó en la despedida.
«Los esfuerzos y la implicación de este clérigo, trabajador, son únicos e inolvidables tanto en Irak como en Irán. Presento mis condolencias al Gobierno iraquí, a la familia del difunto y particularmente a Ammar al-Hakim», el hijo del líder fallecido, indicó Jamenei.
Una procesión fúnebre trasladó el cuerpo del líder del Consejo Supremo Islámico de Irak (CSII), una de las principales formaciones chiíes del país árabe, de Teherán a la ciudad santa de Qom. Posteriormente, el féretro se dirigiría a Nayaf, en Irak, donde será enterrado junto a su hermano, el ayatollah Mohammed Baker al-Hakim, fallecido en atentado en 2003. Previamente, se celebrará una ceremonia oficial en la Zona Verde de Bagdad.
Al-Hakim falleció el miércoles en Teherán, a la edad de 60 años. Fumador habitual, se encontraba en Irán desde hace cuatro meses para recibir tratamiento de un cáncer de pulmón.
Importantes responsables políticos iraníes, como el presidente del Parlamento, Alí Lariyani, y el ministro de Exteriores, Manuchehr Mottaki, asistieron a la ceremonia de duelo que tuvo lugar en Teherán.
«Es una gran pérdida para el pueblo iraquí», señaló, por su parte, el miércoles el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad.
«Era un gran hermano, un potente apoyo en la lucha contra el antiguo régimen [de Saddam Hussein] y un actor importante en el proceso de construcción del nuevo Irak. Su muerte, en la delicada situación actual, es una gran pérdida», declaró en Bagdad el primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki.
Abdel Aziz al-Haim era una de la principales figuras chiíes de la política iraquí y había conseguido algo tan complicado como convertirse en aliado de Irán sin perder los lazos que le unían a EEUU.
Incógnita electoral
Al-Hakim falleció dos días después de que se anunciase la formación de una gran coalición chií para las elecciones legislativas de enero, la Alianza Nacional Iraquí (ANI), de la que se ha autoexcluido el partido Dawa de Al-Maliki. Desde las legislativas de 2005, el CSII ha perdido terreno frente a la formación de Al-Maliki, vencedor de las elecciones provinciales del pasado enero.
El representante del CSII en Teherán, Mohsen al-Hakim, negó, en declaraciones a la agencia ISNA, que el hijo de Al-Hakim, Ammar, vaya a sustituir automáticamente a su padre al frente la formación, como habían difundido algunos medios. «Esta decisión se tomará en los próximos días en una reunión que se celebrará en Irak», añadió Mohsen al-Hakim.