Cerca de 80 inmigrantes en situación irregular, uno de ellos muerto, arribaron ayer a las costas de Malta a bordo de dos barcazas. El primero de los grupos, integrado por unas 40 personas, llegó por sus propios medios hasta la costa y fue interceptado por las autoridades de madrugada. Los otros cuarenta, uno de los cuales falleció, fueron socorridos en alta mar, en la costa de Birzebbugia, por las Fuerzas Armadas de Malta. Según el relato de los propios emigrantes, al divisar la costa algunos de ellos se lanzaron al mar y una de ellas, que no sabía nadar, se ahogó.

Otros 55 inmigrantes que viajaban en un pesquero fueron interceptados por la Guardia de Finanzas a 70 millas al sureste de Portopalo di Capo Passero, en Sicilia. Dos personas fueron arrestadas acusadas de ser los traficantes que llevaban la embarca- ción, mientras que el resto dijeron ser de nacionalidad kurda, turca e iraquí.

La mayoría de los que desembarcaron en Malta proceden de Eritrea, igual que los cinco supervivientes del polémico caso ocurrido el pasado jueves en la misma zona y en el que habrían fallecido 73 personas.

El pasado 19 de agosto, tras avistar la embarcación a la deriva, los equipos de rescate malteses se limitaron a entregar víveres y gasolina a los cinco náu- fragos para ayudarles a entrar en aguas de competencia italiana y evitar así tener el tener que acogerles en la isla. Las autoridades de Malta difundieron ayer una fotografía de la operación tomada a las 10.34 horas de ese día para probar el «buen estado de salud» en que se encontraban.

Sin embargo, la imagen sólo ha incrementado las dudas sobre las supuestas buenas condiciones de los cinco supervivientes, porque 24 horas después los equipos de rescate italianos que llegaron hasta ellos comprobaron que estaban extenuados y muy debilitados. De hecho, dos de ellos siguen hospitalizados.

La hora en que fue tomada la fotografía se vuelve también contra Malta, que habría dejado pasar casi un día entero antes de alertar a las autoridades italianas sobre la presencia de la barcaza. Según la prensa italiana, Malta avisó a Italia a las 7.30 del día siguiente. La Fiscalía de Agrigento (sur) incluirá la fotografía en la investigación iniciada.

La Marina maltesa que se acercó a los emigrantes antes de su rescate, afirmó que querían viajar a Italia, pero los supervivientes señalaron que un barco, cuya tripulación hablaba inglés, se habría negado a subirles a bordo y les habría indicado la dirección de las costas italianas. Según los supervivientes, la travesía duró 21 días, los últimos a la deriva.