Obituario
Robert Idiart deja a los vascos un océano de canciones, textos y fuerza
Datos: Nacido en Azkaine, el 13-1-1931. Falleció el pasado miércoles. Trayectoria: Sacerdote y escritor, autor de dos pastorales y muchos bertsos, fue muy conocido por sus actividades y compromiso abertzale. Colaboraba en diversos medios, como el Journal du Pays Basque.
Goizeder TABERNA |
Sus personas más próximas dicen que fue una fuente inagotable, pero con el tiempo terminó por agotarse. El sacerdote, compositor y bertsolari Roger Idiart falleció la noche del miércoles al jueves a la edad de 78 años después de pelear contra una larga enfermedad. Su funeral tendrá lugar hoy a las 10.00 horas en su ciudad natal, Azkaine.
Ordenado sacerdote en 1955, Roger Idiart trabajó como profesor en Oloron, Hazparne y en el pequeño seminario de Uztaritze. El sacerdote Ttotte Saldubehere, actualmente párroco de Atharratze, le conoció cuando ambos eran estudiantes: «Gracias a él nos enteramos de que Euskal Herria existía».
Muchos lo conocieron en el movimiento abertzale Enbata; otros más tarde en Herriarekin, un grupo de sacerdotes vascos preocupados por el futuro de Euskal Herria, su idioma y el conflicto político. Los militantes pro amnistía recordarán el fervor con el que participaba en sus actividades. En los años 90, formó parte de la delegación vasca que viajó al Vaticano para pedir la creación de una Iglesia vasca que comprendiese a las siete provincias.
Este hombre de Iglesia era también un hombre del pueblo. El historiador Jean-Louis Davant recuerda la vitalidad y la alegría de este azkaindar. Muy popular entre los jóvenes, que se divertían con su sentido del humor, «él les ayudaba para que cada uno eligiese su propio camino», recuerda el padre Mikel Epalza.
Idiart encontró su propia manera para servir a su país. La pesca, la agricultura, los asuntos de la iglesia fueron algunos de los muchos temas en los que se involucró, «aplicando de cerca el evangelio; es decir, estando cerca de la gente», explica Mikel Epalza, quien también le recuerda en las reuniones, que pasaba escribiendo continuamente.
El azkaindarra dejó tras de sí muchas canciones y bertsos, pero también escribió dos pastorales; la primera, sobre Xalbador, se representó en Larraine en 1991; y la segunda fue escenificada por los habitantes de Iruri en 2001. El protagonista: el poeta Etxahun Iruri.
«Tenía un euskara labortano magnífico, y el suletino que hablaba era de excelente calidad», apunta el académico zuberotarra Jean-Louis Davant. Roger Idiart fue suletino de adopción y párroco de Zalgize. «Era el `tratamiento' que se les aplicaba a los curas que no tenían suficiente formación. ¡Pero Zuberoa no es Siberia! Y él encontró su propio espacio», recuerda Davant. Y los habitantes de Zuberoa recordarán el trabajo que realizó para la renovación de las iglesias del herrialde.