El juez de la Audiencia Nacional española Baltasar Garzón impuso ayer una fianza económica de 60.000 euros a las ex parlamentarias de Ezker Abertzalea Nekane Erauskin y Karmele Berasategi para poder eludir la orden de ingreso en prisión que el magistrado activará en caso de que la cuantía no haya sido abonada en el marco de cinco días.

Las dos ex parlamentarias de la izquierda abertzale comparecieron ayer ante el juez español junto a los también imputados por el apartado de EHAK Juan Carlos Ramos, Sonia Jacinto y Jesús María Aguirre. Estas dos últimas también se encuentran en libertad provisional con una fianza de 50.000 euros cada una, después de que fueran arrestadas en febrero de 2008 en el marco de otro operativo de Garzón contra Batasuna.

Aunque ayer la Audiencia Nacional había citado a estos cinco vascos con objeto de informarles de su procesamiento bajo la acusación de «integración en ETA», Garzón adoptó la medida de la fianza económica ante la demanda de la Fiscalía y de la acusación particular para que ingresara en prisión a Berasategi y Erauskin.

Cinco días para abonar

Garzón, que ha rechazado la petición de la Fiscalía y de la asociación «Dignidad y Justicia» para que ordenase el ingreso provisional de Nekane Erauskin y Karmele Berasategi, ha emitido un auto en el que rechaza la demanda al no apreciar «riesgo inminente de fuga», porque Erauskin tiene a su cargo a dos personas con situación médica delicada y porque Berasategi «está jubilada y sin aparente actividad actual relacionada con los hechos».

Sin embargo, el juez español les ha otorgado cinco días de plazo para abonar los 60.000 euros de fianza. Una cuantía que Garzón explica que se ha acordado en función de la responsabilidad que ostentaban las imputadas en EHAK. Formación política que fue ilegalizada por los tribunales españoles en setiembre del pasado año.