«El tiempo previsto este otoño no va a ayudar contra la gripe»
La temporada estival toca a su fin y se confirma que dejaremos atrás un verano bastante caluroso, huérfano de precipitaciones y por tanto de las temidas tormentas. De momento, setiembre ha empezado parecido y seguiremos bajo el anticiclón unos días más.
Joseba VIVANCO |
Resta poco para el final del verano y el calor sigue.
Venimos de un mes de julio que ha sido muy cálido y seco, salvo en Gipuzkoa, donde resultó normal de precipitación y cálido en cuanto a temperatura. En Álava y Bizkaia resultó más cálido y seco. Y por lo que se refiere al mes de agosto, ha sido cálido en estos dos territorios y normal en Gipuzkoa, y con la precipitación ha vuelto a pasar lo mismo; es decir, normal en Gipuzkoa y muy seco en el resto. Y setiembre lo hemos empezado dentro de la normalidad, aunque creo que bajarán bastante las temperaturas porque tenemos anticiclón para unos días y con el anticiclón sabemos que bajan las temperaturas mínimas y las máximas no suben mucho, así que no tendremos termómetros tan altos.
En resumen, un verano...
Un verano que se puede calificar de cálido, aunque bajen las temperaturas en setiembre. Y respecto a las precipitaciones, seco en Álava y Gipuzkoa, aunque habrá que esperar a este mes. Pero si aquí ha sido cálido, que se lo digan a los que han veraneado en el Levante...
Cálido y seco. ¿Influencia del fenómeno «El Niño?
Sí, tiene que ver con ello. Lo que ha provocado es que se hayan formado más depresiones alrededor del paralelo 45, a la altura de la zona marítima de Finisterre, y sobre el Cantábrico lo que producen ese viento sur con efecto Foëhn. Pero lo que ha habido no es mucho calor, sino viento sur. Si en julio hay dos o tres episodios de sur al mes, este año ha habido cinco o seis.
También está siendo un verano sin las habituales tormentas nilas puntuales inundaciones.
Es cierto, el verano ha sido seco.
En cualquier caso, más que del tiempo de lo que habla la gente es de la gripe A. Un otoño e invierno menos fríos de lo normal ayudarían, seguramente, a una menor incidencia. ¿Qué dicen los pronósticos?
Lo que se ve en los modelos norteamericanos es que por aquí siguen dando temperaturas ligeramente por debajo de lo normal, mientras que la precipitación en nuestra zona sería nor- mal, que ya de por sí es mucha. Es decir, no parece que el tiempo vaya a a ayudar contra la famosa gripe A.