Un helicóptero de la Ertzaintza vigila el final de la marcha contra el TAV en Serantes
La Udako Martxa concluyó ayer en la cumbre del Serantes, donde los participantes, vigilados por un helicóptero de la Ertzaintza, recibieron explicaciones sobre la repercusión de la contrucción del TAV y otros proyectos.GARA |
A pesar de las trabas impuestas por Ertzaintza y Guardia Civil, la marcha organizada por la Asamblea contra el TAV finalizó ayer en la cumbre del Serantes, después de partir el sábado 5 de setiembre de Gasteiz. Desde este privilegiado mirador natural con vistas al Abra, la quincena de participantes recibieron extensas explicaciones sobre los diferentes proyectos de infraestructuras que se desarrollan o se pretenden ejecutar en su entorno, empezando por el área portuaria de Santurtzi y Zierbena, salpicada de plantas energéticas, y finalizando con la Variante Sur Ferroviaria.
Es precisamente esta última infraestructura la que posibilitará, según los planes iniciales de las administraciones española y de Lakua, el transporte de mercancías por la red de alta velocidad ferroviaria, uno de los aspectos más «oscuros« del proyecto. Esta variante cuenta con un rechazo importante en Ezkerraldea y Meatzeta no sólo entre colectivos ecologistas, sino, por ejemplo, entre los vecinos de Urtuella, dada su proximidad al casco urbano de la localidad.
Desde la Asamblea insistieron en que todavía es posible paralizar el Tren de Alta Velocidad y por consiguiente la Variante Sur Ferroviaria, con su entrada al puerto a través del túnel del Serantes. A las explicaciones sobre el Superpuerto y las infraestructuras energéticas que se asientan o se proyectan en él se les sumaron las relativas al constante desarrollo urbanístico en Uribe Kosta.
La subida a Serantes y las explicaciones que recibieron en la cumbre los participantes fueron estrechamente vigiladas y grabadas por un helicóptero. Desde la Asamblea contra el TAV subrayaron el «asfixiante» seguimiento policial que han sufrido en las nueve jornadas de marcha por parte de Ertzaintza y Guardia Civil, con repetidas retenciones por parte de agentes uniformados y de paisano, que han tratado de obstaculizar el desarrollo de la movilización.
Por cierto, desde la Asamblea apuntaron que la represión desatada contra el movimiento opositor a la alta velocidad ha podido influir para que la participación en la Udako Martxa haya sido menor que en otras movilizaciones anteriores de este colectivo. A pesar de su criminalización y de la campaña de hostigamiento hacia sus iniciativas, aclararon que continuarán movilizándose porque «parar el TAV es posible».
Una vez visitado algunos puntos del trazado del TAV entre Gasteiz y Bilbo, los marchistas consideran que «se les va a olla a quienes han ideado y a quienes están llevando a cabo esta barbaridad. Tienen el corazón lleno de hormigón».
A lo largo de las nueve jornadas de marcha desde Gasteiz a Santurtzi, la Asamblea contra el TAV ha denunciado el seguimiento constante por parte de Ertzaintza, Guardia Civil y guardas jurados.
La Asamblea contra el TAV avanzó que esta próxima semana hará una valoración de la Udako Martxa y del desarrollo de las obras, anunciando nuevas iniciativas para lograr la paralización del proyecto.