La Diputación alavesa, que inaugura hoy en Gasteiz el ``Bosque de la Luz'', una obra escultórica en homenaje a las víctimas del franquismo, instalará también un visor que proyectará los nombres de los represaliados. Para la izquierda abertzale y Ahaztuak este acto institucional se queda corto.

La idea de que se visualizen las identidades partió de Ahaztuak que, a pesar de saludar la escultura en la fachada posterior del palacio foral, recalcó que «el mejor homenaje es hacer justicia» y recordó que «sigue vigente el modelo español de impunidad que impide hasta investigar los crímenes cometidos por la dictadura». La asociación reclamó también un reconocimiento público a los ideales de las víctimas.

Por su parte, el grupo juntero de la izquierda abertzale en Araba consideró el acto «un paso tímido en un camino pendiente de recorrer». «El paso dado por parte de la Diputación busca redimir una deuda pendiente», manifestaron, apostillando que «un olvido de décadas no se salda con un monumento y una tímida inauguración».