Txiki, de José Antonio Alustiza, demostró que es el mejor perro pastor vasco en habilidad, destreza y obediencia, y se impuso con relativa facilidad en la edición número 43 del Campeonato de perros de pastor de Euskal Herria.

Las pruebas, organizadas por Gerediaga Elkartea en colaboración con el Ayuntamiento de Atxondo, comenzaron a las 11.00 en las campas de Elizaburu, del barrio de Axpe. Como es habitual, las pruebas consistieron en conseguir que el perro se alejase de las ovejas, hacerlas pasar a través de unos setos e introducirlas en el aprisco.

En esta edición compitieron los perros que han resultado campeones y subcampeones de los certámenes celebrados en Bizkaia, Gipuzkoa, Nafarroa e Ipar Euskal Herria, así como el can que ganó en la edición del pasado año. Faltaron a la cita los representantes de Araba, territorio en el que este año no se ha celebrado campeonato.

En concreto, en las pruebas de ayer en Atxondo tomaron parte los abadiñarras Bat, de José Urien, y Argi, de Carlos Ardanza, actuales campeón y subcampeón de Bizkaia, respectivamente; Riki, del pastor Enrike Mendiguren, de Orozko (campeón del pasado año); Txiki, del pastor de Mutriku Javier Zubiaurre; Azkar, del elgoibartarra Juan José Arrizabalaga; el navarro Lagun, de José María Istilart, y de Ipar Euskal Herria acudieron Txiko y Txintxo, de los pastores Marzel Hualde y Joan Paul Iriquen, respectivamente.

En total, se repartieron 880 euros entre los seis mejores pastores, ya que también hubo premios para el pastor mejor vestido, el mejor perro de raza de pastor y el mejor ejemplar del Duranguesado.

Homenaje a colaboradores

En la edición de ayer fueron homenajeados José Luis Zarandona y José Ignacio Alberdi, asiduos colaboradores en la orga- nización de este campeonato de Euskal Herria. El pasado año este reconocimiento recayó en José Mari Uztarroz, de Uharte Arakil.

Además de las pruebas de los perros de pastor, durante la jornada de ayer hubo degustación de productos vascos con label, como pollo de caserío y pimientos de Gernika. A cambio de los cuatro euros que costó la entrada para el campeonato, los organizadores repartieron entre los asistentes vino y queso elaborado en Abadiño.