Cuatro jóvenes de Aretxabaleta fueron arrestados al mediodía de ayer por la Ertzaintza acusados de portar pegatinas con las imágenes de presos políticos vascos en sus camisetas.

La localidad guipuzcoana, que se encuentra inmersa en sus fiestas de San Miguel, acogía ayer una comida en favor de los presos políticos vascos, acto tradicional que se celebra todos los años. Dos furgonetas de la Ertzaintza se personaron al mediodía en la plaza del municipio, que estaba decorada para la ocasión, y los agentes, según indicaron desde el movimiento pro amnistía, se afanaron en arrancar todas las pancartas y carteles reivindicativos que había en los alrededores.

Testigos indicaron que ertzainas tiraron al suelo a un joven que se encontraba en el lugar y lo esposaron por tener en su camiseta una pegatina con la foto de los presos. Quienes estaban en la plaza intentaron mediar con los agentes para que dejaran libre al joven, pero éstos detuvieron a tres más por la misma razón.

El primero fue puesto en libertad en breve, pero al parecer los otros tres continuaban a última hora de ayer detenidos en la base que la Policía autonómica tiene en Bergara y, según indicaron desde Aretxabaleta, acusados de un delito de «enaltecimiento del terrorismo».

Protestas masivas

Con motivo de estos arrestos, los vecinos que disfrutaban de las fiestas llevaron a cabo una concentración antes de la comida para denunciar la actuación de la Policía autonómica.

En la posterior comida participaron medio millar de vecinos, que defendieron que la solidaridad hacia los represaliados políticos vascos «no es delito».

Por la tarde, hacia las 18.00, una manifestación en la que participaron alrededor de 600 vecinos recorrió esta localidad guipuzcoana. En la pancarta se podía leer el lema «Atxilotuak askatu! Elkartasuna ez da delitua».