Tanto Ibai Sueskun -detenido el sábado en Lescun- como Iurgi Mendinueta y Joanes Larretxea -capturados el domingo cerca de Montpellier¯ siguen incomunicados en ma- nos de la Policía francesa. Los tres se encuentran ya en París, adonde fueron trasladados en un mismo avión, que partió primero de Montpellier e hizo escala después en Euskal Herria para recoger a Sueskun.

Se espera que el vecino de Iruñea pase a disposición judicial hoy y que los dos jóvenes de Donostia y Hernani sean llevados mañana al tribunal de París. Por el momento siguen totalmente incomunicados. El movimiento pro-amnistía censuró ayer que «los medios de comunicación han tenido más información sobre Ibai Sueskun que sus propias familias».

Mientras tanto, el ministro de Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, compareció ante los medios para tratar de exaltar la importancia de las detenciones y para ofrecer algunos datos sobre el zulo hallado en Alacant el sábado.

El depósito, en el que se hallaron unos diez kilos de explosivo, fue dejado al descubierto por las últimas lluvias. El ministro afirmó ayer que el material hallado hace pensar que es un zulo «reciente», de «pocos meses», y añadió que se baraja que tenga alguna relación con las explosiones producidas en Mallorca.

Detalló, además, el material aprehendido en la operación de Montpellier. Dijo que a Iurgi Mendinueta se le halló una pistola procedente del robo de Vauvert, tarjetas falsas de la Guardia Civil y el Ministerio de Defensa, munición y una agenda con anotaciones en euskara. A Larretxea, por su parte, se le habrían incautado un revólver con seis cartuchos y munición, y también tarjetas falsas de la Guardia Civil y el Ministerio de Defensa.

«Este ha sido un buen fin de semana», declaró Rubalcaba, en su línea habitual.

«Autolesionado»

En su comparecencia, el ministro de Interior quiso además propagar la versión de que Sueskun se habría «autolesionado», aunque indicó que ésa es sólo una hipótesis y no aportó ningún dato. Curiosamente, se trata de un relato que ya se comenzó a difundir el sábado a través de la Cadena Ser, pero que rápidamente fue descartado por todos los medios ante su inverosimilitud. Sin embargo, Rubalcaba decidió retomarlo ayer y situarlo como prueba de que «la banda no debe tener una organización muy potente» y que lo de Sueskun pudiera definirse como «un proceso de entrega».

Resultó llamativo que agencias como Efe y Europa Press no titularon sus teletipos con esta hipótesis, pese a que sería la primera vez que ocurra algo similar en ETA, lo que dejó claro la nula verosimilitud del relato de Rubalcaba.

En los últimos tiempos, el Ministerio del Interior ha recurrido a descalificar a los detenidos lanzando versiones luego desmentidas, como la de que tienen drogas en su poder o que circulaban por la calle en estado de embriaguez.

También es norma habitual que el ministro de Interior español intente argumentar que los detenidos en el Estado francés se encuentran en mal estado físico porque se ven obligados a vagar por los montes debido al acoso policial. En el caso concreto de ayer, afirmó que Ibai Sueskun fue hallado «con síntomas de desnutrición». Al parecer, fue detenido tras pedir ayuda para tratar de cruzar la muga por su pie.