En Durango desde primeras horas de hoy habrá una exposición de quince puestos de jóvenes agricultores y, al mediodía, realizarán una comida popular para poner fin a la marcha que partió el viernes de Azpeitia y que ha recorrido diferentes localidades entre Gipuzkoa y Bizkaia durante tres días.

Josu Gil, representante de la Asociación de Jóvenes Agricultores Akuilu, señaló a GARA, tras la manifestación que realizaron en Eibar ayer al mediodía, que «nos damos por satisfechos, porque, aunque en la marcha no vamos muchos, el grupo es homogéneo y hay que tener en cuenta que no están las cosas como para dejar tres días abandonado el trabajo».

Para Gil, «el mensaje que lanzamos los jóvenes agricultores sí que está teniendo aceptación y repercusión entre la gente, que nos anima a continuar en la defensa de nuestra agricultura».

El representante de Akuilu destaca que por los pueblos que pasamos nos ayudan con las pancartas y la propaganda y con las comidas. «Es increíble la generosidad y el trabajo de la gente que nos apoya», precisó.

Desde la asociación Akuilu no tienen excesivas esperanzas en que las administraciones públicas «muevan algo. No tenemos mucha fe», precisó. Sin embargo, cree que es necesario que la sociedad sea la que actúe de manera directa para «que haya una cambio de la política agraria. Nuestra marcha ha querido remover a la sociedad, a nuestro pueblo, para que entre todo consigamos que el sector salga fortalecido con los jóvenes».