No hubo ninguna sorpresa en la presentación de la edición 93 del Giro, correspondiente al año 2010. Tal y como los rumores habían filtrado, la corsa rosa arrancará desde la capital de Holanda, Amsterdam, el 8 de mayo y finalizará en Verona el día 30 del mismo mes.

En total, 21 etapas y 3.418 kilómetros repartidos en una etapa prólogo, una contrarreloj llana, una cronoescalada, una crono por equipos, seis etapas para velocistas, cinco jornadas de media montaña y otras tantas de alta montaña, amén de dos jornadas de descanso, más bien de traslado. Un paseo desde la tierra de Van Gogh -la salida de la prueba se realizará desde la Musemplein, en la que está sito el museo del pintor-, a la ciudad en la que Shakespeare enamoró e hizo morir a Romeo y Julieta.

Un paseo... es un decir, ya que la primera de las tres grandes de cada año ha planificado un recorrido duro hasta la extenuación, especialmente a partir de la tercera semana, en la que se suben verdaderos monstruos del calibre del Zoncolan -decimoquinta etapa, de 218 kilómetros-; Plan de Corones -decimosexta jornada, cronoescalada de 12,9 kilómetros-; Mortirolo -para la decimoséptima etapa, entre Brescia y Aprica, de 195 kilómetros-; o Gavia -en la penúltima etapa, con final en la cima del Tonale-.

Datos y nombres propios

La de 2010 será la novena vez que esta importante competición comience fuera de tierras transalpinas y la segunda que empiece en Holanda, tras la salida de 2002 de la ciudad de Groningen.

Después de tres jornadas en el país de los canales, la corsa rosa llegará a Italia y la atravesará a lo largo y ancho, pasando por todas sus llanuras y sus montañas ásperas. La etapa más larga, y una de las más emotivas, sin duda, será la undécima, a celebrarse entre Lucera y L'Aquila, con llegada a la ciudad más afectada por el terremoto del pasado 6 de abril. La cuna de El Pirata Marco Pantani, Cesenatico, acogerá el final de la decimotercera etapa.

Sobre los nombres propios, sólo se conoce la renuncia de Lance Armstrong. Al mismo tiempo, la armada italiana no querrá que otro extranjero se lleve su prueba -sólo 27 corredores no italianos han ganado el Giro, entre ellos el inolvidable Miguel Indurain- tras los éxitos de Alberto Contador, que sopesa volver a la prueba que venció en 2008 y que declaraba que la edición 2010 es «muy apta» a sus características, y el ruso de Gorraiz Denis Menchov que, como vigente campeón de la carrera, estuvo en la presentación de ayer, llevada a cabo en los East End Studios de Milán.