Una nueva formación independentista ha irrumpido en la política catalana este mes de octubre. Reagrupament se constituía formalmente como partido el pasado 3 de octubre en una asamblea donde asistieron 1.200 personas de las 2.300 que ya se han afiliado. Hablamos con el presidente de Reagrupament, Joan Carretero, quien abandonó ERC en abril porque no estaba conforme con la línea oficial del partido de continuar el pacto con el PSC. Carretero había logrado el 37,22% de los votos en la asamblea de ERC en junio de 2008. El objetivo de Reagrupament es conformar una mayoría absoluta en el Parlament para hacer una proclamación unilateral de la independencia de Catalunya.

1.200 asistentes a la primera asamblea de Reagrupament es mucha gente. ¿A qué se debe esta buena respuesta que han encontrado para la formación de un partido independentista?

Pienso que responde al sentimiento de frustración de buena parte de la sociedad catalana, que ha visto que ni reformas de estatutos ni del sistema de financiación resuelven la situación de este país, así que ven que se debe trabajar por la proclamación de la independencia.

Después de la asamblea constituyente, encaran las elecciones autonómicas.

Para cambiar la política de este país hay que estar en el Parlament, no se puede hacer desde la calle; en Europa y en el mundo occidental en general quien quiere hacer política debe tener representación parlamentaria.

Su apuesta es que haya una mayoría absoluta en el Parlament para proclamar unilateralmente la independencia.

Porque entendemos que es la única manera de conseguir la independencia. Hemos visto que los referendos previos (aparte de que no te los dejan hacer) no aportan nada. Lo que necesitamos es una mayoría política democrática representativa del país que haga un acto de soberanía en el Parlament de Catalunya y que camine hacia la independencia claramente. Después ya decidiremos si hay que hacer un referéndum para reafirmar la decisión del Parlament o se deben hacer unas elecciones constituyentes. Pero lo que tenemos claro es que el acto de soberanía lo debe hacer el Parlament.

¿Cree que alguna de las otras formaciones que hay en el Parlament podría ser un aliado en la conformación de esta mayoría para proclamar la independencia? Estoy pensando, por ejemplo, en ERC.

Lo que están haciendo los partidos que actualmente tienen representación en el Parlament de Catalunya nos aleja de la independencia. El papel de ERC en la Generalitat es gestionar la comunidad autónoma, así que no están trabajando para la independencia.

Pero recientemente el presidente de ERC, Joan Puigcercós, ha anunciado que después de las elecciones autonómica sólo pactarán con quien se comprometa a trabajar por el ejercicio del derecho a la autodeterminación.

Yo de las palabras no hago caso. Lo que hay que analizar son los hechos.

¿Como van a trabajar para la conformación de la mayoría que quieren en el Parlament?

En la asamblea de constitución de Reagrupament, el sociólogo Salvador Cardús dijo que a estas alturas en Catalunya todo el mundo sabe que la única solución posible y viable para este país es la independencia. En Catalunya esto lo sabe todo el mundo. Otra cosa es que, sabiéndolo, todo el mundo esté dispuesto a trabajar para lograrlo. Pero yo creo que en el contexto actual ha quedado clarísimo que el sistema político no va hacia ninguna parte porque es endogámico. Hay que cambiar la manera de hacer las cosas.

Reagrupament dice que no es de derechas ni de izquierdas. Pero si consiguen entrar en el Parlament, aparte de trabajar para la conformación de una mayoría por la independencia, ¿qué política van a adoptar en votaciones sobre otros temas?

Esto es un camelo y siempre tengo que oír la misma pregunta. En Catalunya no se hacen leyes, se hacen reglamentos que se disfrazan de ley. La ley de sanidad de verdad la hacen en Madrid, la ley de educación de verdad la hacen en Madrid, la ley de lo que quiera la hacen en Madrid. O sea que aquí no se hacen leyes, aquí se hace gestión, que puede ser más o menos adecuada. Aquí en Catalunya no se puede hacer política. Nosotros no decimos que no haya leyes de derechas o de izquierdas, sino que decimos que aquí no se puede decidir. Por lo tanto, lo primero que hay que conseguir es que en el Parlament de Catalunya se pueda hacer política.

Pero si entrasen en el Parlament, ¿qué política seguirían sus diputados cuando haya votaciones sobre aspectos relacionados con la sanidad o la educación, por ejemplo?

Nuestros diputados tendrán unos mandatos muy claros. El primero: ser representantes del territorio por el que han sido escogidos, por lo tanto defender los intereses de su territorio. Segundo: internet es una herramienta para saber de manera fácil y rápida la opinión de la mayoría de nuestros asociados, así que lo vamos a usar. La tercera cuestión es que si hay un tema muy ideológico, puede haber diputados de Reagrupament que no voten lo mismo; y esto responde a nuestra pluralidad.

¿Qué política o tipo de acción se plantean en otros territorios de los Països Catalans?

Nosotros sólo actuamos en los territorios gestionados por la Generalitat de Catalunya. No queremos hacer como otra gente que ha creado delegaciones postizas en otros territorios. Tenemos afiliados de las Illes Balears, del País Valencià y de la Catalunya Nord, pero entendemos que Reagrupament tiene que apostar por alianzas con formaciones que surjan de estos territorio.

Si consiguen que se conforme una mayoría en el Parlament (sea Reagrupament solo, sea con la alianza con otros partidos) que proclame la independencia, ¿cuál cree que seria la reacción del Gobierno español?

Supongo que acatar la democracia. Es un gobierno de un Estado que está en la Unión Europea, que forma parte del mundo occidental, así que esperamos que respete la decisión democrática de un parlamento.

Euskal Herria tiene un contexto diferente porque hay un conflicto armado, pero hace unos días vimos que la respuesta a un grupo de gente que trabajaba por una salida democrática al conflicto ha sido detenerles.

Yo, con todos los respetos, entiendo que es otro país con otro contexto, así que no quiero entrar a opinar sobre el conflicto que tienen.

No me refería a su opinión sobre el conflicto vasco, sino al hecho que hay una gente que intenta hacer una propuesta por encontrar una solución en clave democrática y la respuesta que han recibido ha sido la represión. En el supuesto que el Parlament de Catalunya proclamara la independencia, ¿no cree que Madrid podría responder también de manera represiva?

Yo entiendo que les costaría explicar al resto del mundo que ha habido una decisión de un parlamento escogido democráticamente y que el Gobierno español no lo respeta. Sería un escándalo de proporciones internacionales que pusieran en la cárcel a unos diputados de un Parlament por el hecho de haber tomado una decisión democrática. Estando dentro del marco de la Unión Europea, entiendo que la presunta batalla con el Gobierno español la tendríamos ganada.

Usted ha dicho en distintas ocasiones que, tras proclamar la independencia, lo primero que haría sería llamar a los Estados Unidos. Por lo tanto, entiendo que usted piensa que Washington apoyaría la creación de un Estado catalán.

Los Estados Unidos tienen la buena costumbre de creer en la libertad y la democracia. Hay el típico catalán que te dice: ¿quien te reconocerá cuando declares la independencia? ¿Montenegro? Yo respondo que espero que sí, porque Montenegro me merece todo el respeto, pero que a quien primero llamaremos será a los Estados Unidos porque nosotros formamos parte del bloque occidental y queremos hablar con la potencia de este bloque.

¿Y por qué motivo los Estados Unidos tendrían que estar dispuestos a ponerse junto a un Estado catalán y en contra de la opinión del Estado español?

Porque los norteamericanos son gente que ama la libertad y respetarán la decisión democrática de un parlamento dentro del mundo occidental.

Volviendo a la actualidad, ¿qué opinión le merecen los referendos independentistas convocados para el 13 de diciembre y posteriormente?

La consulta de Arenys de Munt me pareció muy bien. Pero con las que deben venir no lo tengo tan claro; espero que no se acaben banalizando ni que se acaben enfrentando los partidos que se han puesto en la organización. Si no se banaliza, pues espero que vaya muy bien.

Existe otro proyecto electoral independentista en auge, la CUP, que ha hecho una apuesta diferente a vuestra, puesto que es en clave municipalista. Qué piensa de su estrategia?

Por la CUP tenemos el máximo respeto, pensamos que todo el mundo es libre de hacer la apuesta que considere conveniente, así que tienen nuestro máximo respeto.