El conjunto vasco competirá en cuatro continentes en la temporada 2009-2010: Europa, Oceanía, América y Asia. En sólo cuatro años, el Cespa-Euskadi se ha consolidado y ha superado todas sus expectativas. El crecimiento de la estructura ha sido enorme desde que en 2006 se plantó la primera semilla.

Hasta entonces, los especialistas vascos tenían cerradas las puertas a las competiciones internacionales. La selección vasca cosechaba grandes éxitos pero no se traducían en convocatorias con la selección española a las Copas del mundo y los Mundiales. Había un hervidero de corredores de calidad que corrían el riesgo de quemarse y abandonar la disciplina ante la falta de oportunidades.

En 2006, la Unión Ciclista Internacional (UCI) dio luz verde a la participación de equipos privados en la Copa del mundo, cuando antes sólo se competía por selecciones nacionales. Entonces, Raúl Mena, Daniel Larruskain y Néstor Lejarreta pudieron hacer realidad un sueño que les rondaba desde hacía tiempo; crear una formación para que los corredores vascos pudieran competir a nivel internacional, ya que a menudo se chocaban con una selección española que tenía un grupo formado y cerrado.

«Pusimos dinero de nuestro bolsillo para pagar la tasa de la UCI y a partir de ahí buscamos los medios y los corredores», recuerda Raúl Mena, el mánager del equipo. La primera presentación fue modesta en Abadiño; el año pasado, en el Guggenheim.

El salto cualitativo ha sido enorme. Como reconocía el corredor Unai Elorriaga en la presentación del jueves pasado todo empezó «como una aventura. Fuimos tres corredores a Sidney, sin saber si nos iba a llegar el material. Ahora tenemos la mejor ayuda posible, el mejor material y preparación, tenemos todo el apoyo», señala.

En ese sentido, Leire Olaberria considera que en el Estado español «somos unos privilegiados y sí creo que deportivamente nos envidian». «A muchos les gustaría estar en nuestra situación», destaca.

Los resultados avalan este proyecto. El equipo vasco acumula en estas cuatro temporadas una medalla de bronce y un diploma en los últimos Juegos Olímpicos, dos medallas (oro y bronce) en Campeonatos de Europa, nueve nada menos en la Copa del mundo y casi 50 oros en campeonatos de diferentes categorías y modalidades.

El impulso definitivo al equipo lo dio la medalla de bronce conseguida por Olaberria en los Juegos Olímpicos 2008 de Beijing. Ahora, Cespa-Euskadi cuenta con el apoyo del Bat Basque Team.

Dos bloques

El equipo lo forman seis corredores y se divide en dos partes. La apuesta de Leire Olaberria (32 años) y Unai Elorriaga (29), sobre todo, y Hodei Mazkiaran (20) son los Juegos Olímpicos de Londres 2012, y el objetivo más inmediato en ese camino es el Campeonato del mundo de Copenhage en marzo. La guipuzcoana y el vizcaino, afincado en Nafarroa, tratarán de clasificar sus pruebas en las dos primeras mangas de la Copa del mundo en Manchester (30 octubre) y en Melbourne (19 noviembre).

Mena cuenta con un bloque que trabaja más a largo plazo y miran a los Juegos Olímpicos de 2016. Son Iban Leanizbarrutia (21 años), Martzel Elorriaga (21) e Irene Usabiaga (19). «Corren sin presión, su trabajo es formarse y coger experiencia», apunta Mena.

El equipo y los corredores están preparados para hacer frente a los cambios que se avecinan en la especialidad. Las pruebas de pista podrían sufrir modificaciones profundas cara a los Juegos Olímpicos 2012 en Londres. El Comité Olímpico Internacional quiere establecer una paridad en el número de pruebas de los hombres y las mujeres. El futuro programa podría tener las cinco mismas pruebas para ambos sexos: velocidad, velocidad por equipos, keirin, persecución por equipos y omnium.