El realizador serbio Goran Paskaljevic, máximo triunfador del 54 Festival de Cine de Valladolid con «Honeymoons», se ha instalado en el olimpo de un certamen que ya ganó en 1995 («La otra América») y en 2006 («Optimistas»), y que a lo largo de su historia ha proyectado casi toda su filmografía.

Paskaljevic (Belgrado, 1947), advierte en el filme sobre «el peligro de los nacionalismos», a la vez que critica el recelo de la Unión Europea a la inmigración procedente de países como Serbia y Albania. El drama humano de los inmigrantes que huyen de sus países de origen, además de las trabas que encuentran en su intento de prosperar en la nueva Europa, son los dos mensajes principales de la película, premiada también por la crítica internacional reunida en Valladolid. Es la primera coproducción cinematográfica de la historia entre Serbia y Albania.

La Espiga de Plata, decidida por un jurado que ha presidido el veterano cineasta italiano Ettore Escola, ha sido para «Lille soldat», de la danesa Annette K. Olesen.

El premio al mejor actor ha sido para Alberto San Juan por la interpretación de un profesor de literatura, escritor frustrado y afectado por el mismo brote de esquizofrenia que el resto de la familia protagonista de «La isla interior», de Félix Sabroso y Dunia Ayaso.

El Premio Especial del jurado internacional ha recaído en Robert Guédiguian por «L'Armée du crime», que ahora evoca las acciones de un grupo de revolucionarios extranjeros que lucharon en París contra la ocupación de las tropas alemanas durante la Segunda Guerra Mundial. Guediguian se lleva también el Premio al Mejor Guión, que comparte con Gilles Taurand y Serge le Peron. El galardón por la mejor dirección de fotografía ha sido para Camila Hjelm Knudsen por «Lille soldat».