Turquía e Irán muestran el excelente estado de sus relaciones bilaterales
La visita del presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, a Estambul para asistir a una reunión de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) se convirtió en una muestra de la buena relación bilateral que actualmente mantienen Teherán y Ankara.
GARA
El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, asistió ayer en Estambul a una reunión de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) que sirvió para estrechar los lazos entre Turquía e Irán, en pleno debate internacional sobre el programa nuclear de la República Islámica.
El presidente sudanés, Omar al-Beshir, que se encuentra bajo una orden de búsqueda y captura del Tribunal Penal Internacional, renunció a acudir a Estambul para evitar que Turquía tuviera que hacer frente a una situación embarazosa.
Durante la apertura de la conferencia, que tenía como objetivos las cuestiones comerciales y la lucha contra la pobreza, el presidente turco, Abdullah Gül, aplaudió como «una evolución positiva» la puesta en marcha del diálogo entre Teherán y el Grupo de los Seis (China, Rusia, Estado francés, EEUU, Gran Bretaña y Alemania) sobre el programa nuclear iraní.
«Turquía continuará apoyando con fuerza este proceso y actuará como facilitador», declaró, haciendo referencia al papel de mediador que Turquía, miembro de la OTAN pero que mantiene buenas relaciones con Irán, tiene previsto realizar.
Irán y los Seis se reunieron en Ginebra el 1 de octubre para retomar los debates sobre la cuestión nuclear.
Absteniéndose de realizar comentarios sobre la cuestión nuclear, Ahmadineyad atacó al capitalismo, al que culpó de la crisis mundial, y reclamó «un cambio radical» que pasa por la adopción de «principios económicos islámicos».
A su llegada a Turquía el domingo, se reunió con el primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, en el que era su segundo encuentro en dos semanas.
«Hemos hablado de la OCI, de cuestiones regionales, de relaciones bilaterales y del programa nuclear», declaró Erdogan tras esta entrevista.
Programa nuclear
Erdogan visitó a finales de octubre Teherán, donde Ahmadineyad declaró que apreciaba la posición turca sobre el programa nuclear iraní.
Poco antes, el primer ministro turco declaró que Irán había sido tratada injustamente en la cuestión nuclear, calificando de «locura» la hipótesis de un ataque militar contra la República Islámica.
Los estados occidentales acusan a Irán de intentar hacerse con un arma atómica a través del programa nuclear, mientras que Teherán lo niega categóricamente y destaca su carácter meramente civil y pacífico.