Efectos del Temporal en Euskal Herria
Pequeñas inundaciones tras lluvias que han dejado 227 litros en Zegama
Los servicios de emergencia mantuvieron ayer especial vigilancia en los cauces de los ríos Oria, Urola y Deba, en Gipuzkoa, así como en el Arga a su paso por Iruñea, donde se produjeron pequeñas inundaciones de garajes y locales sin grandes afecciones. El temporal que ha azotado a Euskal Herria durante cinco días ha dejado como cota máxima 227 litros de agua en Zegama, vientos de 134 km/h y olas de 9,5 metros.
Agustín GOIKOETXEA-Idoia ERASO | BILBO
La alerta por temporal mantuvo ayer, de nuevo, en vilo a los servicios de emergencia y aquellos ciudadanos que viven en las cercanías de los cauces de los ríos, en los que se preveía un incremento del caudal. La atención fue especial en Gipuzkoa, en los ríos Oria, Urola y Deba, dado que eran los que bajaban a primera hora de la mañana más crecidos, mientras que el resto permanecían «por debajo del nivel de riesgo», según informó a primera hora de la tarde Interior de Lakua.
Los desbordamientos más importantes se registraron en un área por debajo del nivel del Oria. Además, en esa misma cuenca, la lluvia ocasionó inundaciones en locales y viviendas, además de balsas de agua en carreteras en municipios como Ormaiztegi, Beasain, Ordizia, Andoain y Lasarte. De madrugada, en puntos de Beasain y Ordizia, se acumularon hasta 40 litros por metro cuadrado de lluvia.
En las carreteras GI-631, a la altura de Azkoitia, y GI-627, a su paso por Bergara, también se produjeron desprendimientos, aunque no se generaron problemas en la circulación, mientras que en la A-8, en Getaria, a la mañana se produjo un accidente entre dos vehículos que colisionaron, sin resultar afectado el tráfico rodado.
Con más alarma que otra cosa, por tanto, se puso fin a un temporal que ha dejado unas precipitaciones acumuladas (de las 00.00 horas del día 5 a las 12.00 horas de ayer) de 227,2 litros por metro cuadrado en la localidad guipuzcoana de Zegama, una racha máxima de viento de 134,4 kilómetros por hora en la estación de Matxitxako y una altura de ola máxima de 9,5 metros, calculada también en la boya de Matxitxako.
En Bizkaia, las lluvias dejaron 67,9 litros/metro cuadrado durante el día de ayer en Otxandio. Sin embargo, el municipio de Muxika fue el que más litros recogió en el total de estos últimos cinco días, con 194,1.
El temporal se intensificó y mostró especial virulencia el sábado y el domingo. En estas jornadas las rachas de viento superaron los 120 km/hora en zonas expuestas, especialmente en el litoral, y los 80-100 km/hora en zonas no expuestas, sobre todo de la vertiente cantábrica. En concreto, en Mungia se registraron 98,4 km/h y en el barrio bilbaíno de Deusto 92,4 km/h.
El estado de la mar empeoró debido al fuerte viento del oeste-noroeste y presentó dos máximos a lo largo de este temporal. El primero el día 5, con alturas significantes en torno a 5-6 metros en la costa y en torno a 6-7 metros en las boyas de Matxitxako y Donostia. Y el segundo el domingo, con alturas significantes en torno a 7 metros en la costa (Puerto de Pasaia) y en torno a 8-9 metros en las boyas de Matxitxako y Donostia, pero con algunos máximos puntuales que pudieron rondar los quince metros.
Actividad en Santurtzi y Pasaia
Una vez que el temporal de viento y lluvia amainó en la costa vasca, los 23 barcos que aguardaban para poder operar en el puerto de Santurtzi lo pudieron hacer. Aunque la mar estaba más tranquila que durante el fin de semana, a las 11.30, en El Abra, se registraban olas de hasta 4 metros, lo que obligó a las embarcaciones a esperar a que mejorasen las condiciones para entrar o salir del principal puerto vasco.
Santurtzi, al contrario que Pasaia, no se cerró al tráfico aunque, por ejemplo, 10 buques de pequeño tamaño aguardaron al momento propicio para zarpar. La normalidad se recuperó en torno a las 15.30, cuando los 13 barcos que aguardaban su entrada en puerto y la decena que esperaba para zarpar retomaron la actividad.
En Pasaia, a las 13.15, se reanudó la actividad de los prácticos, que cesó el sábado por el temporal. Desde la Autoridad Portuaria se informó que estaban pendientes de entrar tres barcos y de salir cinco, si bien uno de estos últimos, el ferry de coches City of Bombay, no podrá hacerlo hasta un par de horas antes de la pleamar de hoy a las 10.37, ya que por su eslora de 158 metros se le considera «barco de marea», por lo que, además de que ésta suba, precisa luz del día, que no había ayer a las 22.13, cuando se registró la pleamar.
En territorio guipuzcoano también, el temporal impidió que a la mañana saliera el primer vuelo previsto a Madrid desde el aeropuerto de Hondarribia, ya que el avión no pudo llegar el domingo desde la capital española, según desveló AENA. El resto de aeródromos vascos operaron con normalidad.
La misma que hubo en Bizkaia, donde los ríos Gobela y Kadagua se mantuvieron en su cauce y los problemas se limitaron a pequeñas balsas en las carreteras. Una de ellas fue la causante a primera hora de la mañana en la A-8 de una colisión entre cuatro vehículos, que originó retenciones de hasta 7 kilómetros entre Bilbo y Sestao.
En la capital vizcaina, bomberos, jardineros y policías municipales tuvieron trabajo extra talando árboles destrozados por el viento, limpiando cornisas sueltas y regulando el tráfico en cruces problemáticos donde los semáforos no funcionaban.
En Iruñea, el entorno del Arga en Errotxapea fue cortado al tráfico y retirados algunos de los vehículos que estaban estacionados en el aparcamiento situado en la vía de acceso al Club de Natación, así como en el parking disuasorio de los Corrales del Gas. En Burlata se impidió la circulación de vehículos en la calle Caparroso y en el Camino Viejo como medida preventiva.
En Ipar Euskal Herria, varios ríos y riachuelos se salieron a lo largo del fin de semana de sus cauces, principalmente en la zona de Donibane Lohizune y Azkaine. Los males fueron menores, al haberse establecido de antemano un amplio dispositivo preventivo; incluso 30 bomberos del Bearne estuvieron en Lapurdi de refuerzo.
Los bomberos del sector de Donibane Lohizune efectuaron quince intervenciones. El mayor problema estuvo relacionado con la residencia de ancianos Adina, en Azkaine, en la cual finalmente sólo se inundó el aparcamiento subterráneo; lo mismo ocurrió en la nueva residencia Kali Joko, en Ziburu.
En Biarritz, la principal conducción de abastecimiento de agua potable se rompió debido a un desprendimiento de tierra el sábado por la mañana. La rotura produjo la inundación del aparcamiento público de la Gran Playa y varias discotecas sufrieron grandes desperfectos.
Las líneas de tren que comunican Baiona con Donibane-Garazi y Puyoo también fueron cortadas a raíz de los corrimientos de tierra que tuvieron lugar en las vías férreas. Si la línea que une Baiona y Las Landas está en funcionamiento desde el domingo a la tarde, no es el caso de la que une las dos capitales vascas. No estará en funcionamiento hasta mañana.
Las carreteras también sufrieron las consecuencias de las lluvias torrenciales. El camino que une Urketa con la autopista estuvo cortado desde el pasado viernes.
Desde el jueves día 5 hasta ayer, en Bizkaia se recogieron 192,5 litros por metro cuadrado en Urkiola y 194,1 en Muxika. En Araba las cosas estuvieron más tranquilas, aunque se contabilizaron 103 litros por metro cuadrado en la estación de Agurain.
Estos días, según Euskalmet, se han registrado rachas de viento de hasta 134 km/h en Matxitxako y 118 en Zarautz. En cuanto a las olas, se alcanzaron de entre 8 y 9 metros en las boyas de Matxitxako y Donostia, con máximas de 15 metros.
Entre las consecuencias del temporal que azota a Euskal Herria se encuentra, al parecer, la desaparición de un padre de familia de Arbona desde el jueves pasado. Así, siguiendo los protocolos de la Policía francesa, este fin de semana se ha declarado la alerta de desaparición de esta persona.
El coche del varón fue localizado el jueves al lado de una carretera inundada por el río Uhabia. Al estar el río desbordado muy cerca del mar, y dado que la zona ya ha sido registrada por agentes, la búsqueda se dio por concluida, tal y como comunicó la Policía francesa. El desaparecido habría abandonado su vehículo -un 4x4- el jueves al atardecer en la carretera del barrio de Molino, en Bidarte. Desde entonces, su familia está angustiada al no disponer de noticias o pistas de su paradero.
En relación con las condiciones meteorológicas adversas, ayer por la mañana se produjo un accidente de tráfico en la carretera N-636, a la altura del municipio vizcaino de Atxondo, en el que resultaron heridos graves dos jóvenes -un hombre y una mujer de veinte años-, a consecuencia de un choque lateral en el que se vieron involucrados un Peugeot 307 y un Peugeot Partner. El siniestro tuvo lugar a las 6.45. Y las dos víctimas fueron trasladadas en una ambulancia hasta el Hospital de Usansolo con pronóstico grave.I.E.
Euskalmet prevé para hoy una jornada lluviosa en las horas centrales en Euskal Herria. Aunque de madrugada no lloverá, a partir de la mañana volverán las precipitaciones, sobre todo en las horas centrales y de forma abundante.