Persecución a la izquierda abertzale
El PSE pretende utilizar el fallo de Estrasburgo para legitimar a López
El PSE quiere utilizar una propuesta de apoyo a la sentencia del Tribunal de Estrasburgo sobre la ilegalización de Batasuna que se debatirá mañana en el Parlamento de Gasteiz para «despejar cualquier duda sobre la representatividad de las instituciones de Euskadi» que «algunos han venido poniendo en entredicho tomando como pretexto la Ley de Partidos y la ilegalización». Con esa nitidez se expresó ayer su portavoz en la Cámara autonómica, José Antonio Pastor.
I. IRIONDO | GASTEIZ
El PSE convocó ayer una rueda de prensa para dar cuenta de una enmienda a una moción que se debatirá mañana en el pleno del Parlamento de Gasteiz. Salir para esto ante los medios no es una actuación habitual. La razón la explicó el se- cretario general del grupo parlamentario, Óscar Rodríguez: «Éste es un tema importante para nosotros».
El PP plantea una moción consecuencia de una interpelación al consejero de Interior, Rodolfo Ares, en la que le preguntó sobre la ilegalización de Batasuna y la sentencia del Tribunal de Estrasburgo, dentro de la estrategia de marcaje al Gobierno de Patxi López que el partido de Antonio Basagoiti mantiene en esta materia.
La moción del PP se centra en instar al Gobierno de Lakua a «proseguir con una política de deslegitimación política y social» y a que la Cámara respalde «la actuación del Estado de Derecho» aplicando las resoluciones de los tribunales estatales y del Tribunal de Estrasburgo.
El PSE sube la apuesta
Sin embargo, la moción del PP le ha parecido insuficiente al PSE, que ha decidido subir la apuesta, endureciendo los términos de la misma -ya no le basta hablar del «terrorismo de ETA», sino que necesita decir «terrorismo totalitario de ETA»- y am- pliando los puntos de la moción, consciente de que los proponentes no tendrán inconveniente en seguirles.
Según el portavoz parlamentario del PSE, José Antonio Pastor, la enmienda podría ser «objeto de acuerdo de todos los partidos democráticos», porque en ella «se recogen cosas tan elementales y de sentido común como es cumplir la Ley de Víctimas, respaldar la acción del Estado de Derecho, cumplir las sentencias de los tribunales y abogar por la unidad de los partidos democráticos contra la violencia terrorista».
Pero hay un punto al que el propio Pastor reconoció que su partido le da una especial importancia, y es aquel en el que se lee que «el Parlamento Vasco respalda, de manera especial, la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que ha dejado sentado que tanto la Ley de Partidos como la ilegalización de formaciones políticas que no condenan a ETA han sido medios necesarios para defender la democracia».
Referencia trascendente
Según el portavoz del PSE, la referencia al fallo de Estrasburgo sobre la ilegalización de Batasuna «es algo que para nosotros reviste una trascendencia política nada menor, por todo lo que hay implicado en este debate, que no es otra cosa que la legitimación de las instituciones representativas de Euskadi. Una legitimación que en los últimos tiempos algunos han venido poniendo en entredicho, tomando como pretexto la Ley de Partidos y la ilegalización de aquellas fuerzas que como Batasuna y sus herederos siguen sin condenar el terrorismo de ETA».
Y adujo Pastor que «esta acusación se ha vuelto especialmente reiterada ahora, con la finalidad de erosionar al nuevo Gobierno presidido por el lehendakari Patxi López, y cuestionar igualmente la nueva mayoría del Parlamento Vasco surgida de las elecciones autonómicas».
El PSE se quejó de que el PNV emplee estos argumentos de forma muy selectiva. Recordó que igualmente ilegítimo puede ser el diputado general de Gipuzkoa, que tampoco ganó las elecciones y gobierna, y las JJGG de este herrialde, donde tampoco pudo estar presente la izquierda independentista.
José Antonio Pastor y Óscar Rodríguez aseguraron que el pleno de mañana, cuando se trate su propuesta, «puede ser importante para recuperar la pedagogía democrática que el país necesita», puesto que, a su entender, «es hora de reestablecer la sensatez perdida».
Una página de «El Mundo» servía ayer para evidenciar de nuevo el férreo seguimiento y espionaje al que están siendo sometidos los dirigentes independentistas, tanto dentro como fuera de la cárcel. La supuesta noticia, en cualquier caso, dejaba claro que el diario cuenta con datos de fuentes policiales, pero con escasa información de lo que ocurre en la izquierda abertzale.
Por un lado, el periódico madrileño daba cuenta de los seguimientos a los que está siendo sometido Rufi Etxeberria, y que han permitido a las fuerzas de seguridad del Estado y a «El Mundo» hablar de con quién mantiene reuniones y de con quién, supuestamente, no ha podido contactar.
El espionaje llega también dentro de las cárceles, hasta el punto de que se controlan incluso los estados de ánimo de Arnaldo Otegi y Rafa Díez. Y, según «El Mundo», «los dos aparentan optimismo respecto al futuro». Es más, la firmante de la página llega a decir que Otegi «está convencido», según fuentes policiales.
Los presos políticos vascos están sometidos a la constante escucha de sus comunicaciones. Instituciones Penitenciarias tiene instalado en quince prisiones, y serán más el año que viene, un sistema de grabación digital, tanto de las comunicaciones orales como telefónicas con conexión en los servicios centrales para «realizar un adecuado análisis y explotación de la información en tiempo real» y, por lo que se ve, para trasladarlo a determinados periódicos. GARA