Mensaje
El interés periodístico del mensaje navideño del Rey de España es tan inexistente como el respeto del unionismo español a la sociedad vasca. Lo que vale es el gesto. Lo que no está en los sentimientos de la gente quieren meterlo en casa por la pantalla de la televisión. Conseguirán lo contrario. Pero al impostor sólo le queda imponer. Luego hablarán de las audiencias. Un mal chiste.