Isaac ROSA (2009/11/10)
¿Vivimos mejor sin el comunismo?
«Todo lo que nos decían del comunismo era mentira; pero lo peor es que todo lo que nos contaron del capitalismo era verdad». (Chiste popular en los países ex socialistas)
Que la historia la escriben los vencedores se comprueba de nuevo estos días, con las celebraciones por los veinte años sin muro. Salvo alguna encuesta que muestra la decepción de los ciudadanos del antiguo bloque socialista, echo de menos, entre tanto entusiasmo unánime, un debate a partir de una pregunta elemental: ¿Estamos mejor desde que desapareció el mundo comunista?
La sola pregunta ya parece sospechosa. Porque si el comunismo murió hace veinte años, lo que no desapareció es el anticomunismo, que marca hoy las conmemoraciones. Lo habitual ante esa pregunta es que, después de tirarte a la cabeza un «libro negro», te sacudan con otra pregunta: «¿Acaso preferirías vivir en la antigua URSS?». No, yo no querría. Pero si fuese ruso y la alternativa fuese la actual Rusia, me lo pensaría.
¿Ha mejorado la vida en los países ex socialistas? No lo parece, si atendemos a los indicadores y las encuestas. Más bien al contrario: no han dejado de crecer la miseria, la desigualdad, la enfermedad, la inseguridad y la violencia; y a cambio la democracia no ha avanzado mucho. Viven mucho mejor unos pocos, sí, pero la mayoría quiere algo más que libertad para comer, y ni ésta abunda. (...)
¿Y a este lado del muro? ¿Estamos mejor? Pues tampoco. No sólo fallaron los sueños de paz y prosperidad eternas. Además perdimos el contrapeso que suponía la existencia del mundo socialista, en tanto que posibilidad. Sin él, los Estados no ven tan necesario asegurar bienestar y empleo, ni avanzar en unos derechos y una libertad que ya no tienen espejo en que mirarse.