Art Spiegelman regala tres cuadernos secretos a los aficionados al cómic
GARA | MADRID
Si ya elevó el valor artístico del cómic con «Maus», obra que le valió el premio Pulitzer en 1992, Art Spiegelman regala ahora «Be a nose-Sé una nariz», una joya personal a todos los aficionados al cómic con la publicación de tres cuadernos que desvelan notas de investigación y detalles de su creación.
Spiegelman explica cómo se enfrenta al papel en blanco y su relación ambivalente con los cuadernos de bocetos: «si un cuaderno logra sobrevivir cierto tiempo a pesar de mis angustias, siento una mezcla de bochorno por su tosquedad y un tímido orgullo por mi fogonazo de disciplina», asegura, tras definirse como «demasiado neurótico» para dibujar regularmente en un cuaderno.
Admirador de «el arte por el arte», que se descubre a sí mismo con cada trazo y que, confiesa, acostumbra a «arrastrar las líneas, a insistir en que se conviertan, por ejemplo, en una nariz».