A pocas horas para que aproximadamente cinco millones de bolivianos y bolivianas acudan a las urnas, se vive una moderada calma en el oriente y occidente del país con la incógnita de si el MAS logrará el control de los dos tercios de la próxima Asamblea Legislativa Plurinacional, con todas las encuestas dándole un porcentaje de voto superior al 53,7% con el que ganó las elecciones en diciembre de 2005.

El lunes en Cochabamba y el jueves en La Paz se dieron los dos cierres de campaña más grandes del Movimiento al Socialismo. Pudimos seguir en vivo cómo decenas de miles de personas abarrotaban el Viaducto cochabambino y la Ceja de El Alto paceña, para escuchar las palabras del presidente del Estado Plurinacional.

Evo Morales, primer mandatario indígena en 184 años de historia, pidió el voto de sus compatriotas para hacer realidad el sueño de Tupac Katari de volver y ser millones, para hacer realidad el sueño de una Bolivia unida, y también dio la bienvenida al proceso revolucionario que está trayendo la dignidad al país andino amazónico.

Resultados de las encuestas

Las encuestas publicadas en la última semana previas a las elecciones de mañana dan a Evo Morales y al Movimiento al Socialismo una intención de voto de casi el 60%, mientras que su principal perseguidor, el ex prefecto de Cochabamba Manfred Reyes, sin un programa político definido pero aglutinando el voto anti Evo, no consigue pasar del 20% en el que se ha instalado prácticamente desde que presentó su candidatura. Esto podría constituir un resultado histórico, pues si hasta 2005 ningún presidente había conseguido superar el 50% de los votos, en 2009 en vez de acusar el desgaste de 4 años de poder, supondría un aumento significativo de votos.

Con más énfasis y empeño que nunca para evitar el voto cruzado, el MAS se encamina hacia la consecución de los dos tercios de la próxima Asamblea Legislativa Plurinacional, asegurando prácticamente 4 senadores de los 4 en juego en La Paz, Oruro y Potosí, 3 en Cochabamba así como posiblemente Tarija y Chuquisaca, y entre 1 y 2 en Santa Cruz, Pando y Beni, lo que, de cumplirse, prácticamente le garantizaría 24 de los 36 senadores en disputa.

La presencia de observadores internacionales que garanticen la transparencia de los comicios es muy alta, con una delegación de la OEA desplegada en los 9 departamentos del país, así como también de la Unión Europea e incluso del Parlamento de Catalunya, garantizando si cabe aún más la transparencia de unas elecciones que se sustentarán en un padrón biométrico digital de los más avanzados del continente.

Logros de Gobierno

«Hemos logrado el Gobierno pero aún no tenemos el poder», han sido palabras repetidas por Evo Morales incesantemente durante los últimos cuatro años.

Sin embargo, se ha avanzado bastante en esta legislatura en la toma del poder, la propia Asamblea Constituyente, y la aprobaciones de una nueva Constitución Política, reconociendo un Estado Plurinacional formado por 36 nacionalidades, lo que es un gran avance. De sobra es conocida la nacionalización de los hidrocarburos y el reparto de 5.000 millones de dólares del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) mediante los famosos bonos, y con traspasos directos a prefecturas, municipios y universidades.

También se ha escrito bastante sobre la estabilidad de la economía boliviana. Recientemente, en una visita a Cochabamba con el objetivo de firmar créditos por valor de 171 millones de dólares, el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, elogió el manejo de la economía, que obtendrá un crecimiento de su Producto Interior Bruto por encima del 3%, con unas previsiones similares para 2010. A destacar también las reservas internacionales, que de 1.000 millones han pasado a más de 8.000 millones de dólares.

Pero sin ser tan conocidos, al menos en el exterior, se han dado pasos importantes en la mejora de las condiciones socio económicas de la población en general. Se han rebajado las tarifas eléctricas en torno a un 25% y las del gas un 50%. Mediante el programa «Evo Cumple» se han invertido 237 millones de dólares en 2.810 proyectos de obras, saneamiento, agua potable o infraestructuras deportivas por poner algunos ejemplos, que han llegado a los barrios y localidades más alejadas del país; se han entregado más de 1.400 tractores a las comunidades campesinas para mejorar la productividad en el agro y contribuir a la seguridad con soberanía alimentaria en todo Bolivia, complementándose con la creación de SEMAPA, la empresa estatal de apoyo a la producción de alimentos, para combatir la escasez de alimentos y la especulación de los precios. Asimismo, la instalación de energía eléctrica se ha incrementado de un 33 a un 47% durante la presente gestión gubernamental. En términos de empleo se puede hablar de más de 400.000 nuevos empleos generados y las exportaciones crecieron respecto a las dos legislaturas anteriores.

La pobreza, en unos índices altísimos todavía, se ha reducido en 6 puntos porcentuales, pasando del 37% al 31% el índice de personas que viven en la extrema pobreza, añadiéndosele un incremento del 47% en el salario mínimo.

En el ámbito de la salud, y mediante la Operación Milagro, 441.000 personas han sido operadas gratuitamente de la vista, ampliándose también la cobertura en salud para los jóvenes entre 18 y 25 años, y construyendo más de 500 nuevos centros de salud, que han posibilitado la reducción de la mortalidad infantil. Y si hablamos de la educación, hay que recordar que la UNESCO declaró en 2008 a Bolivia como territorio libre de analfabetismo, convirtiéndose en el tercer país latinoamericano que alcanza tal meta, tras ser alfabetizadas más de 800.000 personas mediante el método «Yo Sí Puedo». También es destacable la creación de tres universidades indígenas para la enseñanza en quechua, aymara y guaraní.

En lo político, se ha recuperado la soberanía con la expulsión del embajador de Estados Unidos, así como de la DEA o de la agencia de cooperación USAID; se ha logrado la sede de UNASUR que se construirá próximamente en Cochabamba, se han rebajado los sueldos del presidente y los ministros en más del 50%, eliminando al 100% los gastos reservados, destacando también la creación de un pionero Ministerio de Transparencia y Lucha contra la Corrupción, y se ha reducido a la mitad la deuda externa boliviana.

Aunque con déficits, no podemos dejar de mencionar la gestión de la tierra, con una redistribución por parte del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) de 4 millones de los más de 10 millones de hectáreas intervenidas. Se espera terminar el proceso de saneamiento de las tierras en 2013, en el que de las 40 millones de hectáreas saneadas y tituladas, 31 lo habrán sido desde 2006.

Programa de gobierno 2010-2015

Y si los avances y la mejora de las condiciones de vida de la mayoría de la población son notables, y por eso se van a mejorar los resultados electorales de hace 4 años, para los próximos 5 de legislatura el MAS presenta un programa de gobierno, una declaración de intenciones que apuesta por un gran salto industrializador del país, por una segunda revolución, tras la de 1952, pero esta vez no realizada mediante las armas y sobre la tierra, sino mediante la construcción de grandes fábricas y sobre el cemento de las carreteras de doble vía que se quieren construir o mejorar en un intento de integración caminera, de vertebración viaria del país, ya criticada desde algunos sectores, por hacerse sin una perspectiva de respeto al medio ambiente y a los derechos colectivos de las comunidades, indígenas en su mayoría, afectadas por las obras.

Satélite tupac katari made in China

En el cierre de campaña nacional en La Paz, Evo Morales prometió dos fábricas estatales de cemento en Oruro y Potosí, plantas de generación hidro y termoeléctricas en Tarija, Chuquisaca, La Paz, Cochabamba, Santa Cruz, Beni y Pando, así como una planta geotérmica en la Laguna Colorada, departamento de Potosí, que permitirán exportar más energía que petróleo o gas natural, así como un emporio petroquímico en Santa Cruz y otro hidrometalúrgico en Oruro, la polémica explotación del gigantesco yacimiento de hierro del Mutún en el oriente boliviano, o la del litio del Salar de Uyuni, mediante una posible, y estratégica, alianza con empresas francesas, brasileñas, o chinas.

China se convierte también en un aliado en el sector de las telecomunicaciones, con la construcción y financiación del satélite Tupac Katari, que será puesto en órbita en los próximos años, y permitirá al campo boliviano el acceso gratuito a las telecomunicaciones. Otras de las promesas importantes son el seguro agrícola, la jubilación para los transportistas, o una renta mínima de 1.800 bolivianos, unos 250 dólares.

El 7 de diciembre, con una más que previsible mayoría en la Asamblea Legislativa Plurinacional, se abre una nueva etapa del proceso de cambio, de la revolución democrática y cultural que vive Bolivia, en la que será importante ir superando las contradicciones que provoca el intento de construcción de nuevos paradigmas en la manera de gobernar, con los viejos esquemas industrializadores en lo económico, y asistencialistas en lo social.

*Katu Arkonada es investigador y analista del centro boliviano CEADESC (Centro de Estudios Aplicados a los Derechos Económicos, Sociales y Culturales)