Laia ALTARRIBA I

Todo el mundo está convencido que sin la reacción virulenta que tuvo el Estado ante la convocatoria de Arenys, aquella consulta habría pasado desapercibida. Pero una vez que se destapó la caja, la gente no necesita actuar frente lo que cree que es una agresión, sino que la ilusión de Arenys se ha contagiado y cientos se han propuesto como voluntarios para organizar las convocatorias en sus poblaciones.

Pocos días antes de la consulta, la publicación de una encuesta ha mostrado el crecimiento del sentimiento independentista en Catalunya. La publicó el periódico «Avui» el jueves. Encargada por la UOC (Universitat Oberta de Catalunya) al Instituto DYM, indica que un 50,3% de la población votaría afirmativamente en un referéndum independentista. Se realizaron 2.614 entrevistas. Por contra, el sondeo revelaba que sólo el 17,8% votaría en contra, mientras que el 24,6% no iría a votar.

El presidente de CiU, Artur Mas, se apresuró a intentar relativizar el resultado. En el PSC ningún responsable ha querido hacer declaraciones sobre el sondeo. Aunque este viernes, el secretario de organización del PSC, José Zaragoza, no opinaba sobre la encuesta, sí que lo hizo sobre las consultas del 13-D. Para Zaragoza, «no son lo que ayuda más a la defensa del Estatut» porque «pueden dar una imagen de este país más radicalizada de lo que toca». Seguro que Zaragoza había estado repasando la encuesta antes de hacer la rueda de prensa, y no le debía haber gustado demasiado la imagen de país que le mostraba. Como tampoco le debe ilusionar que sean varios los concejales del PSC que han apoyado la celebración de consultas en sus respectivos municipios.

Todas las consultas convocadas para el 13-D tienen el apoyo de la mayoría del Pleno de los respectivos ayuntamientos. Pero este apoyo es básicamente simbólico, pues para evitar que los órganos judiciales invaliden el acuerdo plenario (como sucedió en Arenys) estos consistorios no van a participar en la organización de los referendos ni a ceder las dependencias municipales para su celebración. Son plataformas de ámbito local o comarcal las que se están encargando de su coordinación y de buscar espacios privados para que sirvan de colegios electorales.

Si bien esto era así hasta hace pocos días, el 24 de noviembre el alcalde de Sant Pere de Torelló rompía la dinámica y ponía a disposición de los organizadores las instalaciones del Ayuntamiento. «Desde una posición democrática, ¿cómo puedo negar, como alcalde, a los vecinos del pueblo la posibilidad de usar las dependencias municipales?», explicaba el regidor, Jordi Fàbrega, en declaraciones a GARA. Sant Pere es un municipio pequeño, cuenta tan solo con 2.200 habitantes. De los trece concejales, doce son de la misma agrupación independiente, EPM, vinculada a ICV (Iniciativa per Catalunya-Verds, los socios catalanes de Izquierda Unida).

Osona, epicentro del 13-D

La decisión de Jordi Fàbrega resulta especialmente relevante porque es el portavoz de Decidim.cat, la plataforma que agrupa 1.400 alcaldes y concejales de los Països Catalans comprometidos con el derecho a la autodeterminación. Participan electos de todos los partidos de adscripción catalana, e incluso algunos del PSC-PSOE. Muchos están fomentando, como no podía ser de otra manera, la celebración de consultas independentistas en sus poblaciones.

Sant Pere de Torelló está enclavado en la comarca donde más referendos se celebran el día 13, Osona. De los 51 municipios, 34 han convocado consulta, incluida la capital, Vic. Esto significa que 117.932 personas tienen derecho a votar (los mayores de 16 años empadronados). No sorprende, pues, que las direcciones nacionales de todos los partidos políticos que han mostrado sus simpatías por la convocatoria hayan anunciado que van a seguir la jornada electoral en directo desde esta comarca.

El coordinador de la comisión gestora Osona Decideix, Alfons López Tena (quién fue, a propuesta de CiU, vocal del Consejo General del Poder Judicial español), celebra el buen ambiente que hay en la comarca estos días previos a la consulta: «Hay más de 2.000 voluntarios trabajando, cosa que muestra que este es un movimiento muy de base, que no controla ningún partido».

Los organizadores, siguiendo las premisas de Arenys de Munt, han elaborado un censo a partir del padrón municipal que incluye a todas las personas mayores de 16 años, y también a los extranjeros no comunitarios que no pueden votar en otros comicios. Así pues, de las 700.000 personas convocadas a las urnas el domingo 13, un 20% (más de 125.000) son extracomunitarias.

Esta semana, los coordinadores a nivel nacional de las consultas hacían una rueda de prensa junto a representantes de distintos colectivos de inmigrantes, conscientes que son estas comunidades quienes pueden ayudar mejor a movilizar el voto de los recién llegados. Diego Arcos, presidente del Casal Argentí de Barcelona, consideraba que estaba participando en un proceso similar al que hicieron sus compatriotas argentinos hace 200 años, cuando «derrotaron y expulsaron la Corona española». Para el vicepresidente del colectivo de inmigrantes senegaleses, Mbaye Gaya: «Catalunya nos ha acogido, así que defenderemos que la nación catalana tenga Estado propio».

En Osona también se han movilizado para llegar a los colectivos de inmigrantes. En la comarca hay un 14% de inmigración extracomunitaria, y en Vic y Manlleu la cifra asciende hasta el 25%. Así pues, López Tena explica a GARA que «se ha hecho un trabajo muy de base para hablar con todos los colectivos, centros religiosos, deportivos y culturales donde se reúnen las distintas comunidades». El resultado, por el momento, está siendo positivo, pues entre los centros que acogerán las mesas electorales hay como mínimo una mezquita: la de Manlleu.

Para López Tena, que puedan votar es lógico, pues «es lo que sucede en los países con democracias avanzadas». Además, considera que es una injusticia que en las otras elecciones «los inmigrantes que vienen de España tengan derecho a voto desde el primer día y se lo nieguen a los otros inmigrantes».

Interés en Mallorca

La segunda ciudad con mayor número de habitantes donde el domingo se podrá votar es Vilanova i la Geltrú, con 54.322 empadronados mayores de 16 años (la primera es Sant Cugat). El municipio tiene un altísimo porcentaje de habitantes nacidos fuera de Catalunya: el 60%. Es por esto, explica el concejal de la CUP (la candidatura de la izquierda independentista) Quim Arrufat, que han editado carteles que animan a votar afirmativamente en catalán, castellano, amazigh, árabe y rumano. Aquí, las previsiones de participación son más bajas que el 40% que acudió en Arenys a las urnas: «Si no hay sorpresas, un 8-10% será un buen resultado, aunque puede haber sorpresas y situarse en el 15-20%. No hay que olvidar que Vilanova es una ciudad sin tradición independentista, así que 15.000 votantes estaría muy bien».

Ni en las Balears, ni en el País Valencià, ni en la Catalunya Nord se celebra ningún referéndum el día 13. Pero algunos concejales de Mallorca ya han anunciado que van a seguir la jornada con mucha atención, pues quisieran trasladar la iniciativa también a la isla. Joan Llodrà, concejal de Manacor (39.000 habitantes) por ERC, asegura que algunos electos baleares tienen ganas de intentarlo, pero sin precipitarse. Llodrá, junto con los otros nueve concejales que tiene ERC en Mallorca, ha convocado una reunión abierta el 12 de diciembre para constituir una plataforma de electos, «y a partir de aquí sumar complicidades y apoyos».

Y después del 13-D, ¿qué? «Las consultas han marcado un antes y un después», asegura el alcalde de Sant Pere de Torelló, Jordi Fàbrega. Y continúa, satisfecho: «El camino hacia la independencia ya ha empezado, por primera vez como país tenemos una estrategia independentista que nos define una cierta hoja de ruta».

En esta hoja, la primera parada es el 13-D, y luego vendrán las consultas que se están preparando para febrero y para abril. Fábrega, además, subraya que lo interesante es que «este proceso no está en manos de ningún partido concreto».

Hay quien pregunta por qué esas mismas formaciones que apoyan referendos locales luego no proponen lo mismo en el Parlament de Catalunya. Fàbrega se muestra optimista: «Algunos partidos parlamentarios ya concretan en sus programas en vistas a las elecciones autonómicas plantear de una vez por todas el proceso de autodeterminación a nivel parlamentario».

«Suceda lo que suceda el día 13, el legado de este periodo es que hay miles de personas que han aprendido a aparcar sus diferencias en otros ámbitos y a trabajar juntos para tirar adelante un proyecto colectivo desde la base», concluye López Tena.