La selección brasileña deberá conformarse con jugar la Copa del Presidente, que decidirá los puestos del trece al veinticuatro del Mundial que se celebra en China, tras caer (21-28) ante Dinamarca.

El cuadro brasileño, que en la primera jornada derrotó a Francia (22-20) y plantó cara a Suecia (23-26) y Alemania (30-32), ha demostradoque no está lejos de los mejores, pero la clasificación final no podrá hacerle justicia.

Por otra parte, en parecido trance se halla la selección de Ucrania, que pese a apabullar a Australia por 40-7, precisa obrar el milagro de ganarle a Austria y esperar la presumible derrota de Angola frente a Rusia.

Otra selección que no puede descuidarse es la de China, que recibió un severo correctivo ante la selección española, 27-12, y sólo está un punto por encima de Costa de Marfil. Anfitrionas y africanas se la jugarán hoy en un disputado cara a cara.