CRíTICA cine
«El erizo» Al servicio de la burguesía
Mikel INSAUSTI
Elegir para debutar en la realización la adaptación de una novela de éxito siempre es arriesgado, aunque también es una manera de ganar prestigio a costa de otros. La debutante Mona Achache ve así asociado su nombre al de la escritora Muriel Barbery, pero sus intentos por transformar lo literario en cinematográfico resultan baldíos. Al igual que hiciera Montxo Armendariz en “Obaba”, sustituye el recurso narrativo del diario escrito por el de la videocámara, lo que le brinda soluciones visuales pero sin resolver el papel que juega la niña protagonista como conductora del relato. No es lo mismo leer sus pensamientos que escucharlos de viva voz, hasta el punto de que sus discursos superpuestos a las imágenes que graba se vuelven redundantes y, por muy precoz que sea la cría, no deja de ser una burguesita de lo más pedante. Otro tanto sucede con las citas literarias, que en un libro no cargan tanto como acumuladas dentro de una película de poco más de hora y media. Para colmo, el trío estelar posee una cultura que se pasa de exquisita y que combina la biblioteca selecta de clásicos rusos (Tolstoi) con la filmoteca privada japonesa (Ozu) y la fonoteca sinfónica en el baño (Mozart).
Lo mejor de «El erizo» con diferencia es la actuación de Josiane Balasko, por cuanto su personaje de la modesta portera resume a la perfección las intenciones de la película, haciendo que los demás vecinos del lujoso inmueble parisino sobren, aristócrata nipón incluido. Expresa la metáfora central mediante una caracterización en la que las púas del animal las constituyen su aspecto abandonado y un carácter tan reservado como esquivo. La belleza interior, lo que la autora entiende por elegancia, deriva de una preparación autodidacta llevada a cabo en secreto. Me parece injusto que al final tenga que sacrificarse para que esa heredera mal criada aprenda su lección, aunque el abrazo en el que se funden ambas parece tan sincero que hace que su muerte cobre sentido en forma de valioso legado vital.