La Diputación de Bizkaia y el Museo Guggenheim Bilbao presentan hoy a los 33 miembros del Patronato de la Fundación Museo Guggenheim Bilbao -conformado por instituciones públicas y empresas- los informes realizados sobre la viabilidad de la ampliación de la pinacoteca bilbaina de esta marca en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, tal y como lo hicieron la pasada semana ante el Patronato de la Fundación Solomon R. Guggenheim de Nueva York.

La reunión tendrá lugar hoy por la mañana en la sede de la pinacoteca bilbaina y serán el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, la diputada foral de Cultura, Josune Ariztondo y el director del Museo Guggenheim Bilbao, Juan Ignacio Vidarte, los encargados de presentar los informes. Por la tarde, se reunirá el comité ejecutivo del Museo, compuesto por los Patronos Fundadores (Diputación de Bizkaia, Gobierno de Gasteiz y Fundación Solomon R. Guggenheim) y los Patronos Estratégicos (BBK, Iberdrola, BBVA, y Acerlor Mittal), donde se discutirá el contenido de dichos estudios preliminares, un total de trece, realizados por consultoras privadas contratadas al efecto.

Declaraciones contrapuestas

La ampliación del museo en el edificio que alberga las colonias infantiles de la BBK en Sukarrieta, es una iniciativa del diputado general de Bizkaia, para la que anunció una reserva de 100 millones de euros. La consejera de Cultura, Blanca Urgell, expresó la semana pasada sus dudas sobre el proyecto y advirtió de que, por su impacto medioambiental, Urdaibai podría perder la consideración de Reserva de la Biosfera concedida por la UNESCO.

Será en la reunión de hoy cuando se viasualicen las diferentes posiciones. Durante el día de ayer fueron varias las declaraciones realizadas por partidos y colectivos que pusieron de manifiesto las contrapuestas opiniones que existen respecto al proyecto.

Antonio Basagoiti (PP) y Joseba Egibar (PNV) coincidieron en reclamar diálogo entre el Gobierno de Lakua y la Diputación de Bizkaia. En sendas entrevistas a Radio Euskadi pidieron un estudio serio del proyecto y un debate del mismo entre las instituciones implicadas. «Hay que hacer un debate racional, sin prejuicios y sin enfrentamientos. Una inversión así no se puede despachar simplemente con un `no porque no' o un `sí porque sí'», dijo Basagoiti.

Por su parte, Egibar opinó que el proyecto de Urdaibai «merece respeto, estudio y contraste» y que el conjunto de las instituciones están para «sumar». «Algún diálogo se tendrá que abrir entre las instituciones», añadió. Sobre la posible labor a realizar por el PP en este asunto, Egibar declaró que «el Gobierno Vasco socialista está absolutamente condicionado por el PP» y que Basagoiti «actúa como el jefe del fielato, él decide qué pasa y qué no pasa, como se ha visto con los Presupuestos».

El colectivo ecologista Eguzki, por su parte, pidió que se de «carpetazo» al proyecto, ya que la apertura de esta infraestructura cultural en Urdaibai «supondría un atentado ecológico, con un gran impacto ambiental sin precedentes». Para este grupo, la apertura de ese centro supondría un «trasiego de visitantes» que conllevaría una «agresión incalculable e impredecible para esta Reserva de la Biosfera, sin capacidad de conservación o regeneración».

El PSE-EE propuso la creación de una ponencia en el acuerdo de las administraciones vascas, en la que participen los artistas y otros expertos con los que, con sus aportaciones, se pueda elaborar un documento «que el Parlamento aportará para una mejor renegociación del Acuerdo de las Administraciones Vascas con la Fundación Solomon R. Guggenheim en 2013».