La Real Sociedad da un giro positivo en su crisis económica
Aperribay avala con números los efectos de su primer año de gestión
Jokin Aperribay anunció que la Real ha pasado en dos años de un déficit de 9,1 millones en su primer ejercicio en Segunda a un equilibrio presupuestario para el actual que sólo se rompería con los dos millones de pérdidas que provocaría el ascenso. Explicó que la conversión de la deuda con las instituciones en préstamos participativos permite pasar de un patrimonio neto negativo de 30,5 millones en junio a uno positivo actual de 6,1, lo que evita la disolución del club.
Joseba ITURRIA | DONOSTIA
El presidente de la Real Sociedad, Jokin Aperribay, hizo públicas ayer en rueda de prensa las conclusiones principales de los números que someterá a la aprobación de los accionistas en la Junta Ordinaria del 28 de enero en el velódromo de Anoeta.
Justo un año después de la comparecencia en la que explicaron los objetivos que le llevaron a presentarse como alternativa al Consejo existente, Jokin Aperribay -ya respaldado socialmente por la marcha del equipo como líder con ocho puntos de ventaja sobre el cuarto- avaló el cambio con los números que traducen un giro radical a la grave crisis económica.
Su antecesor se encontró el 3 de enero del 2008 con un presupuesto de 24,9 millones de gastos que en lugar de intentar recortar para adecuarse a los ingresos de la Segunda aumentó hasta los 32,8, con unas pérdidas de 9,1 millones como consecuencia en buena medida de los 5,1 que obligó a la Real a asumir con gastos no previstos en forma de fichajes, comisiones y due diligence que había prometido pagar en caso de no subir.
El único ingreso extraordinario que se generó durante su mandato fue la venta del local de la calle Txurruka que el Consejo anterior también hubiera podido vender. La venta supuso un ingreso en ese ejercicio de 1.888.519 euros cuando Badiola difundió que la operación «reportará a la Real un importe de 3.650.000 euros. De esta manera, ingresa una plusvalía muy importante de 2.400.000».
Además las pérdidas correspondientes a ese ejercicio aumentan hasta los 23,2 millones como consecuencia de los 14,1 recogidos como «ajustes contables de ejercicios anteriores basados en el informe concursal». Son cantidades que, salvo los 3,5 millones del contrato con Kutxa, fueron contabilizadas como ingreso el año en que se cobraron y entre los que destacan los 9,5 millones pagados por la Diputación por Zubieta XXI.
Un año después...
El 20 de diciembre el Consejo de Aperribay asumió la responsabilidad de dirigir el club y se encontró gastos comprometidos por 25 millones de euros. No sólo se habían aumentado los del ejercicio anterior. Tampoco se rebajó con respecto el presupuesto heredado por Badiola.
Aperribay anunció al asumir su mandato que encontró un déficit de 10,1 millones, de los que ayer señaló que al final del ejercicio se redujo a los 7,5. Además logró acuerdos con jugadores y trabajadores para reducir el déficit de tesorería de la pasada temporada en 2,2 millones y con la Diputación para que aportara otros tres correspondientes a dos años de patrocinio para poder afrontar los pagos.
Pero durante el ejercicio 2008-09 la Real fue sometida a una inspección fiscal que aumentó su deuda con Hacienda por 11,3 millones por impago de IRPF en los años anteriores, a los que se sumó una provisión de IVA por 4,4 pendientes de confirmación. Entre la deuda previa al descenso, esta nueva y las pérdidas de ejercicios anteriores, la deuda de la Real creció hasta los 47,4 millones en junio de este año, la mayor parte con Hacienda y Kutxa. Aperribay explicó que se detallará la situación concursal cuando el juez dicte una sentencia, pero la conversión de la deuda con las instituciones públicas en préstamos participativos motivará que de los 30,5 millones de patrimonio neto negativo que tenía el club en junio se pase a los 6,1 positivos de la actualidad.
Aperribay explicó que, si al resto de acreedores la Real les deberá pagar con sus ingresos ordinarios a razón de 1,4 millones anuales, los préstamos participativos sólo obligan a reducir la deuda con Hacienda y la Kutxa con un porcentaje de los ingresos extraordinarios. Destacó la importancia de que no se registren nuevas pérdidas para evitar la disolución del club.
Para ello Aperribay anunció que su Consejo ha conseguido equilibrar los ingresos y gastos en el presupuesto de este ejercicio, que en un principio era de 17 millones y ahora asciende a 19 porque, según explicó, no estaban contabilizadas las fichas de Bravo y Riesgo y además han aumentado los gastos con las renovaciones y con los actos del Centenario. Éstos han permitido aumentar los ingresos, capítulo que crece también con la subida de abonados y recaudaciones con la buena marcha del equipo.
Para poder cuadrar el presupuesto subirán un 2% los abonos, que se cobrarán hoy, y habrá un segundo medio día del club. Con esas medidas sólo se prevén dos millones de pérdidas en caso de ascenso porque los jugadores cobrarían 1,5 millones de prima y el Mallorca recibiría 500.000 por el acuerdo con Nsue. Esta pérdida se compensaría con los mayores ingresos que obtendría el club al año siguiente en Primera División.
Estabilidad económica y social
Pero a pesar de unos datos económicos muy alentadores, Aperribay destacó en su introducción que «queda mucho para lograr la estabilidad económica y para ello debemos seguir con presupuestos ajustados porque, si no, es fácil que caigamos otra vez en causa de disolución».
Recordó que se marcó los objetivos de lograr esa estabilidad económica y el ascenso y que también trabaja por «la estabilidad social. Aunque a veces unimos la estabilidad social a los resultados deportivos, este Consejo cree que es al revés. Es la estabilidad social la que conduce a unos resultados deportivos acordes a nuestra capacidad».
Aperribay abandonó Anoeta hace un año escoltado por la Ertzaintza tras una Junta lamentable y por eso añadía ayer que «la estabilidad social es un reto de esta sociedad y estamos convencidos de que el mejor ejemplo de eso y de normalidad lo daremos en la próxima Junta».
La Real cerró el primer año en Segunda con unas pérdidas de 9,1 millones, de los que 5,1 estuvieron motivados por los gastos no presupuestados que acometió Badiola en el segundo semestre. A esas pérdidas se añadieron otros 14,1 por ajustes contables.
Jokin Aperribay quiso subrayar que no por gastar más en la confección de la plantilla se logran siempre mejores resultados. Recordó que en el primer año en Segunda se gastaron 32,8 millones, con un gran incremento en la segunda mitad por los fichajes y el equipo sumó los mismos 34 puntos en la primera vuelta y en la segunda. Añadió que en el pasado se bajó a los 25,7 millones y se sumaron 32 puntos en la primera vuelta y 35 en la segunda. No hizo falta que recordara que la Real tiene ya 35 puntos a cuatro jornadas del final de la primera vuelta pese a gastar menos en su primer equipo que en ejercicios anteriores. En el presupuesto entregado a la LFP en julio de 17 millones, que será sometido a votación de los accionistas, se recogían sólo nueve de gastos del primer equipo incluidos pagos de sueldos y salarios a los jugadores, técnicos, médicos y masajistas, pagos por adquisición de jugadores y amortizaciones, que son las tres cantidades que se han sumado para englobar en el cuadro inferior el costo del primer equipo desde el año 2002-03, el del subcampeonato, hasta ahora.
Aunque aquel año hubo una relación, Aperribay destacó que «no siempre la obtención de puntos tiene una directa relación con los gastos. Aunque es cierto que cuanto más dinero tengamos para gastar más fácil es acertar, hay veces que es mejor contener los gastos y dar oportunidades a los jóvenes de la cantera. Y para esa contención del gasto quiero destacar el compromiso de los jugadores de la primera plantilla para apretarnos le cinturón y por obtener mejores resultados. Hemos logrado 16 renovaciones con esta contención de gastos y nos sentimos orgullosos, como aficionados de la Real Sociedad, porque el futuro deportivo pasa por dar estabilidad a Zubieta y el futuro económico por ajustar presupuestos».
Destacó que el gasto de personal, incluido el deportivo y el no deportivo, se ha reducido en tres años (19,3 en la 07-08, 17,3 en la 08-09 y 12,2 en la 09-10), pero que proporcionalmente ha aumentado este año el porcentaje del total del presupuesto destinado al primer equipo. Eso debe seguir así, pero la Real no puede gastar en su primera plantilla una media de treinta millones como en los tres últimos años de Astiazaran ni veinte como en los dos de Fuentes. Pocos clubes de Primera destinan esas cifras a sus primeros equipos y esta temporada puede servir para corregir los malos hábitos de los últimos años porque ni el ascenso permitirá gastar mucho más.J. ITURRIA
De los 32,8 millones del año anterior se redujeron los gastos a 25,7 y las pérdidas a 7,5. La deuda aumentó en este período en 11,3 millones con Hacienda por el IRPF de años anteriores y una provisión por el IVA de otros 4,4, con lo que la cifra llegó a los 47,4.
Con las pérdidas y el aumento de la deuda con Hacienda a 30 de junio el patrimonio neto era negativo en 30,5 millones. El convenio de acreedores y la conversión de la deuda institucional en préstamos participativos motivan que ahora sea positivo en 6,1.
La Real presentó en julio ante la LFP un presupuesto de 17,1 millones que será sometido a la votación de los accionistas y cuyos gastos e ingresos previstos ya llegan ahora a los 19 por la continuidad de los dos porteros, las renovaciones y los actos del Centenario.
