Javier López Vallejo firmó ayer por la tarde su desvinculación del Zaragoza, equipo en el que ha militado durante dos temporada y media, lo que podría ser el primer paso de una operación a dos bandas que podría dar con el navarro en la Real, mientras que Asier Riesgo podría encontrar acomodo en el equipo maño, que busca portero.

Acuciado por su mala situación deportiva y su enorme inestabilidad institucional, el Zaragoza es hoy por hoy un hervidero, el baile de nombres en la entidad blanquilla es constante y en su urgencia por tratar de salvar la temporada, Asier Riesgo podría ser una solución para la posición de portero.

Y es que, su apuesta de este verano, el argentino Carrizo, no ha cuajado -López Vallejo le quitó la titularidad hasta que el Real Madrid le hizo siete goles- y ahora, con la salida del navarro, deben buscar otro jugador para la portería y el debarra gusta en la capital aragonesa.

Intereses comunes

En este punto parecen coincidir los intereses de Zaragoza y Real, los aragoneses se reforzarían con un portero que ya ha rendido en Primera, mientras que la Real no sólo se quitaría la patata caliente que tiene tras la negativa del portero a renovar, sino que incluso podría aprovechar para fichar entre sus descartes.

Y es que, ante la posible marcha de Bueno al Mundial de Sudáfrica en el momento cumbre de la temporada, la secretaría técnica está interesada en reforzar la vanguardia y habría mostrado interés en Frank Songo'o, jugador que junto a otros tres -Braulio, Ayala y Ewerthon- estaría negociando su salida del Zaragoza.

Precisamente el Mundial de Sudáfrica podría abrirle las puertas de la Real a López Vallejo. Sabido es que Bravo deberá acudir a la cita sudafricana sin que la Liga en Segunda haya concluido y si Riesgo terminase abandonando la Real, Lasarte tendría sólo a Eñaut Zubikarai para partidos que pueden ser transcendentales.

La confianza en el ondarrutarra es plena en la Real, pero López Vallejo, desde ayer libre para fichar con cualquier equipo, podría ser una buena opción para no tener que confiar la portería a un juvenil ante cualquier incidencia de Zubikarai.