Despiden en Bilbo al ex preso Jon Etxeandia, promotor de Ataramiñe
Un sencillo acto realizado en el tanatorio de Zumalakarregi sirvió de recuerdo de Jon Etxeandia, que permaneció 18 años de su vida en cautiverio, y también como reconocimiento a su aportación en la creación de la editorial Ataramiñe y su empeño en la enseñanza del euskara.GARA |
Decenas de personas despidieron ayer en Bilbo en un sencillo acto a Jon Etxeandia, ex preso y uno de los creadores de la editorial Ataramiñe, que falleció el martes a los 47 años de edad.
El cuerpo sin vida de este ex preso, que estuvo más de 18 años en prisión, descansaba durante la tarde de ayer en el tanatorio Zumalakarregi de la capital bilbaina, a donde acudieron muchas personas para despedir al ex preso político y reconocer la labor realizada durante toda su vida. No faltaron representantes del movimiento pro amnistía ni sus alumnos a los que enseñaba euskara cada día.
Sus vecinos del barrio bilbaino de Indautxu volverán a despedirlo mañana en la concentración que han organizado en recuerdo de Etxeandia y que se celebrará a partir de las 19.30 en el «txoko de Kirruli».
Etxeandia, que cursó los estudios de Periodismo en prisión, era un enamorado de la literatura. Sus compañeros de prisión lo recuerdan siempre escribiendo cartas, escritos, poemas o incluso dirigiendo obras de teatro. Estando en prisión llegó a publicar diversos escritos que los firmaba bajo el seudónimo de Pabel Orbantza.
Su afición por la escritura lo llevó a ser uno de los creadores de la asociación cultural y, a su vez editorial, Ataramiñe, que cada año hace posible que las creaciones de presos, deportados y refugiados políticos vascos vean la luz y den a conocer asimismo estas realidades y los sentimientos que generan en sus protagonistas. El propio Etxeandia reunió en el libro ``Kartzelako lanak'' algunos de los poemas y escritos durante su cautiverio.
Etxeandia fue arrestado en 1983 cuando tan sólo contaba con 21 años. Tras denunciar duras torturas, el vecino de Indautxu fue enviado a prisión donde lo mantuvieron hasta julio del 2001. Salto del Negro, Melilla, Málaga y Alicante fueron algunos de los destinos que conoció en los 18 años de cautiverio.
Desde que en julio de 2003 recobrará su libertad, Etxeandia dedicó parte de su esfuerzo a la enseñanza del euskara en las «gau eskolak» impulsada por GITE-IPES en Bilbo.
Etxeandia, en los 18 años que permaneció preso, tuvo que convivir con su enfermedad ya que fue estando en la cárcel cuando le fue diagnosticado un «trastorno bipolar».