GARA > Idatzia > Iritzia> Hemeroteka

DIARIO DE NOTICIAS DE ALAVA Miguel Sánchez-Ostiz 2010/2/19

Cifras y botines

Las cifras que, a modo de pensión, tienen previsto cobrar algunos banqueros españoles cuando se retiren han salido estos días a la luz y causan estupor... y silencio. Son colosales, difícilmente representables fuera del papel donde la cifra es eso, una cifra, que para la mayoría no se refiere a nada real, como no sea a que son tan colosales que hacen pensar en que esas gentes son todopoderosas. Con el dinero que maneja habitualmente esa casta, se puede comprar todo: bienes materiales, espacio, conciencias, parcelas decisorias de poder... se puede influir en la opinión pública con medios de comunicación poderosos y se pueden vencer muchas manos. (...)

Los ricos, los muy ricos, han sido los principales beneficiarios del socorro que ha prestado de manera urgente el Estado a la economía, a su economía, a su sistema económico, no los más desfavorecidos. Sostiene Michel Serres, un filósofo que ha reflexionado sobre este tiempo de crisis, de diversas crisis, que para llegar a esa situación ha sido necesario «que los ricos se vuelvan tan colosalmente ricos que todos los consideremos tan necesarios a nuestra supervivencia como el mundo». Y las clases más desfavorecidas son las que a su costa soportan el socorro de esa casta sin la que al parecer no podemos vivir. Demagogia. Todo lo es en cuanto no nos gusta. (...)

Ante esas cifras millonarias, la primera reacción es la de comparar lo que se tiene con lo que no se tendrá jamás. Quien lo hace no entiende de economía. Entiende poco más que la relación entre su trabajo y su salario, y su prevención social. No entender. (...) Por no entenderse, tampoco se entiende que los verdaderos perjudicados de estas crisis en cadena, las del fin de una época, no hayan tomado de verdad la calle. Las cifras del paro, con ser colosales, no repercuten en exceso en las calles. No hay desordenes públicos ni el redoble de la desesperación se escucha. Todavía. (...) Quienes ganaron dinero, ganaron mucho dinero. Una parte muy importante de la sociedad está a cubierto de esa amenaza siniestra de quedarse sin trabajo y sin ingresos. Hay una desproporción enorme entre las cifras que manipulan como malabaristas los expertos y los medio expertos y los políticos, cifras de ocasión, cortinas de humo, y la realidad de las cosas concretas, la de los casos concretos y la del conjunto. No te refieras a ella. Eres demagógico, apocalíptico.

Cuando los delincuentes de guante blanco recuperen la confianza en sí mismos que, con descaro, dicen haber perdido, y de paso la autoestima, nada menos que la autoestima, a la individual y a la colectiva se refieren los muy bandarras, pondrán de nuevo en marcha el sistema solidario y sostenible, el suyo, el de sus principios y valores eternos -la religión y la patria nunca andan muy lejos de estos potajes-, esto es los que procuran la ventaja inmediata y sostienen el sistema de castas, de nuevo en marcha. El engañabobos que no cesa. (...)

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo