La volatilidad de la bolsa es muy alta. La crisis financiera, por otro lado, ha avivado ese comportamiento errático del mercado financiero. Los expertos financieros, quienes se encuentran en el epicentro de la actividad bursátil, reconocen que la recesión ha devuelto a los valores a una realidad más objetiva, ya que hubo un período entre 2005 a 2007 que se habían «inflado» y habían adquirido un volumen que no se correspondía con la realidad. Muchas de esas compañías lo supieron y se mantuvieron en ese espejismo, pero esos mismos expertos reconocen que una vez que se ha pasado del mundo virtual al real, el perdedor ha sido el empleo, porque, o se ha reducido o se ha congelado. Si se compara la actividad del último año, el valor de las compañías vascas desde febrero de 2009 a enero de 2010 ha crecido un 41,1%, de 68.043,32 millones han pasado a 96.004, 06 millones, aunque cerraron el año pasado con un valor de 105.176,17 millones, lo que ha supuesto una caída del 8,72% en un mes, o lo que es lo mismo: las catorce empresas de origen vasco que cotizan en la bolsa han perdido 9.172,11 millones en veintidós días de actividad. Sin embargo, algunas de las compañías que mantienen crecimientos importantes de su capitalización bursátil mantienen expedientes de regulación de empleo que afectan a las plantillas como Tubacex o Tubos Reunidos.

Las compañías que más crecieron en valor el año pasado fueron el BBVA, con un 91,7% más; CAF, con un 90,6% más, y Befesa, con un 49,36%. Iberdrola Renovables y Gamesa bajaron un poco.

La especulación financiera es total y es ese mercado el que está logrando importantes ganancias a pesar de que la crisis en la economía real está extendiendo sus raíces. Hay dos hechos importantes: los resultados financieros de las cajas y los bancos suponen un récord si se cuentan beneficios y dotaciones en provisiones que apartan para afrontar el futuro próximo. De esta manera, la gran banca logró 31.456 millones en 2009, de ellos 14.000 millones se destinaron a dotaciones y las cajas de ahorros, otros 16.500 millones, de los que 12.000 millones fueron a provisiones para atenuar los momentos críticos de la crisis, que se espera que se produzcan una vez pase junio de 2010.

En la bolsa, sin embargo, la sociedad Bolsas y Mercados españoles (BME), reconoce en su último número de la revista «A fondo» que en diez meses las bolsas mundiales, según la Federación Mundial de Bolsas, han recuperado 15 billones de dólares de capitalización y añade que «los mercados bursátiles mundiales cerraron 2009 con ganancias generalizadas». Las compañías que cotizan en la bolsa española pagaron 32.298,14 millones en dividendos en 2009, aunque si se añaden las diferentes devoluciones de primas y reducción de aportaciones sobrepasa los 33.892,23 millones. Es la cantidad más alta pagada en la historia bursátil.

Pablo Fernández y Javier del Campo, pro-fesores del IESE, han analizado la rentabilidad y la creación de valor en el Ibex 35 desde 1991 a 2009. En sus conclusiones confirman que la creación de valor para los accionistas en 2009 ascendió a 97.000 millones, inferior a los 238.000 millones de 2008, pero hay que recordar que el año pasado fue el que centró la crisis económica. La rentabilidad creció un 38,3% en 2009, mientras que un año antes cayó en un 36,5%.

En los diecinueve años, el trabajo del IESE demuestra que la rentabilidad media del accionista creció un 12,5%, con un crecimiento del 44% en 1997 y en 2006 con un aumento del 36%. La capitalización de las empresas se multiplicó por diez y el volumen de negociación se multiplicó por 84. En 2009, la capitalización de la bolsa española sobrepasó el billón de euros, 1,107 billones; aunque en enero de 2010 bajó a 1,031 billones, por la pérdida del petróleo y la energía.