La Copa con más MVPs de toda la historia
Arnaitz GORRITI
Sí, la Copa ya es pasado y como dicen, no se puede vivir en el pasado. No obstante, difícilmente se podrá llegar a tal nivel de magia, difícilmente se involucrará tanto una ciudad -bueno, dos, démosle su parte de razón a Tontxu Rodríguez- y, sobre todo, difícilmente habrá tantos MVPs en ninguna otra edición copera.
Aparte del MVP obtenido por Fran Vázquez y el grupo de animadoras -vox populi, vox Dei-, MVP a la organización del evento, que trabajó arduamente para facilitar la labor a los profesionales y para que los aficionados sólo se preocuparan de los encestes de su equipo; el responsable de marketing de Bilbao Basket, Pedja Savovic opinaba que «esta Copa ha sido la culminación de un trabajo bien hecho. Si existe un punto de perfección, éste ha estado aquí».
MVP a la afición en general. Durante cuatro días el buen rollo contaminó la atmósfera -mejor dicho, la limpió-, en una suerte de carnaval prolongado con colores, juegos, cánticos, bailes e implicación con sus jugadores y el propio torneo. Buena parte de este MVP va para la afición vasca. Los dos equipos presentes no pudieron brillar, pero sus hinchas no decayeron por ello. Un poco por picardía, y un poco por orgullo -y su punto provinciano-, bilbainos y gasteiztarras se retaron -con la competencia de las demás hinchadas- a ser los más leales.
En este sentido, la afición baskonista, con su ejemplar comportamiento pese a la abultada derrota en semifinales se lleva la palma, sobre todo porque consiguieron que sus jugadores levantaran la cabeza orgullosos de sus seguidores. Tal ha sido el impacto de semejante comportamiento, que el propio Josean Kerejeta firmaba ayer una nota en la que subrayaba «en nombre de todo Baskonia, quiero sumarme a este agradecimiento que el equipo tuvo en la pista, hacia una afición que ha sabido estar al lado de sus jugadores en los momentos buenos y en los no tan buenos. Han dado ejemplo de que la afición y la diversión no están reñidas con el respeto y el civismo».
Y un último MVP honorífico. Para unos entrañables locos, miembros del foro acb.com, que en su ya clásica «copa forera», donde se impuso el Estudiantes, rindieron homenaje a la seguidora del DKV Joventut Amanda Castell, fallecida hace casi un año y que, de seguir entre nosotros, por nada se la hubiera perdido -ni la Copa de los jugadores, ni la copa forera-. Este vínculo de baloncesto y amistad, muchas veces anónimo, es lo que inunda de magia la Copa.