Con mayor o menor entusiasmo, diversos dirigentes políticos siguen haciendo valoraciones sobre la resolución de la izquierda abertzale. Algunos por iniciativa propia, como Juan José Ibarretxe, que se ha visto en la necesidad de hacer pública su opinión escrita sobre la cuestión. Otros entran en materia porque les resulta inevitable que los periodistas les pregunten sobre ella.

Entre tanto, la izquierda abertzale entiende que, con la conclusión del debate en sus bases y la publicación de las conclusiones, ya están de hecho en una nueva práctica política y que, por tanto, ya han dado comienzo a lo que han definido como proceso democrático. Reconocen que sólo con eso no avanzará y que es necesario que, una vez puesta la base teórica, el máximo número de agentes se sume a ese trabajo.

Entre las valoraciones de los dirigentes políticos sigue teniendo todavía un enorme peso la pregunta de qué hará ETA ante las conclusiones del debate, o la izquierda abertzale si ETA cometiera alguna acción armada. Ibarretxe, por ejemplo, escribía que no le parece «mal» lo que «Batasuna dice en su documento Zutik» y le parecen «bien las exigencias de más claridad que reclaman los partidos nacionales vascos en caso de atentado (injerencia) de ETA».

Se trata de una pregunta a la que diversos dirigentes independentistas ya han venido dando respuesta en distintas entrevistas en los últimos días. Tanto Txelui Moreno, en Infozazpi Irratia el jueves, como Tasio Erkizia, en «Deia» el domingo, aseguraron que era un escenario que no contemplan pero que, si se da, actuarán en consecuencia al texto de la resolución aprobada.

También Rufi Etxeberria, en sus declaraciones a «Berria», abordaba la cuestión e incluía a ETA entre los agentes que deben hacer avanzar el proceso democrático que ya está en marcha. Recordaba que ETA había hecho público recientemente un comunicado en el que hacía suyas las palabras y las decisiones de la izquierda abertzale. Por lo tanto, señalaba Etxeberria, «concluido el debate, visto el mandato que se le da al conjunto de la izquierda abertzale y teniendo en cuenta el comunicado mencionado, lo único que cabe esperar es que ETA profundice su compromiso con el proceso democrático».

Pese a todo, algunos dirigentes políticos parecen moverse en esquemas del pasado. El presidente del PSE, Jesús Eguiguren, por ejemplo, afirmó ayer que Batasuna está en una fase de transición y que, en uno o dos años, podría condenar a ETA. A su juicio, lo decidido por la izquierda abertzale en su documento lleva a que «los de ETA paren o a que Batasuna les tenga que condenar».

La entrevista concedida por Eguiguren a TVE estuvo prácticamente dedicada en su totalidad a analizar las cuestiones referidas a la izquierda abertzale y a movimientos que puedan darse en el futuro. Cabe destacar que el presidente del PSE sigue instalado en la práctica del apartheid diciendo que «va a ser muy difícil que Batasuna esté» en las próximas elecciones municipales y forales, en 2011, porque los pasos dados «no son todavía suficiente».

Urkullu: «Afecta a su mundo»

Ante tanta expectación mediática y declaraciones de unos y otros, el presidente del EBB, Iñigo Urkullu, reprochó a la izquierda abertzale que pretenda que los partidos políticos «entren» en un debate público de un proceso que «sólo les afecta a ellos; es su proceso, no el de los demás».

En una entrevista en Herri Irratia-Loyola Media, Urkullu aseguró que la difusión pública de dicho debate de la izquierda abertzale responde a «una estrategia de comunicación» y a un intento de que «los demás entremos en el acompañamiento de lo que para ellos es necesidad». «Hemos conocido el documento la semana pasada, probablemente mañana conozcamos otro hito, el sábado otro elemento, el miércoles de la semana que viene otro y así sucesivamente», comentó.

«En procesos anteriores -quiso destacar- hemos intentado ayudarles y hemos sido pagados como hemos sido pagados; no debemos nada a ese mundo». No obstante, el líder jeltzale expresó su deseo de que el debate de Batasuna «salga bien y que nada sea igual en ese mundo», aunque los demás lleven, dijo, treinta años esperando a que eso suceda. Añadió que, si toman la determinación que todo el mundo espera, «todo puede cambiar».

Alternatiba, dispuesta

El portavoz de Alternatiba, Oskar Matute, manifestó ayer a Infozazpi Irratia que la «reflexión» realizada por la izquierda abertzale «va en la buena dirección» y apostó por impulsar «un proceso de acumulación de fuerzas de izquierda en Euskal Herria», «con respeto a la pluralidad» y «sin excluir a ninguna fuerza». Según afirmó, «es el momento de empezar a debatir» cómo «articular una mayor pujanza de nuestras ideas».

Matute dijo «saludar» la «reflexión» de la izquierda abertzale porque, «en un momento como en el que estamos, no basta sólo con señalar las carencias o dificultades de cada agente político, sino también en hacer cosas desde lo que cada uno tiene en su mano hacer».

Alternatiba considera que la resolución adoptada por la izquierda abertzale «nos permite pasar a un nuevo estadio de unidades de acción desde la izquierda en Euskal Herria, entre las fuerzas soberanistas y con un fuerte componente de izquierdas».

Matute especificó que «ni que decir tiene que nuestra labor es contribuir a que esa reflexión se haga fuerte y pueda resistir los envites que le puedan llegar de uno y otro lado».