El sindicato de la Ertzaintza ERNE ha exigido al consejero de Interior de Lakua, Rodolfo Ares, que el departamento ejerza la acusación particular «en los casos de agresiones y falsas denuncias de malos tratos y tortura» contra agentes de la Policía autonómica. Este llamamiento acompaña al ya realizado anteriormente por CCOO, sindicato que situó este elemento como requisito para renovar el convenio de la Ertzaintza.

El sindicato policial realizó esta solicitud por carta, precisamente, pocos días después de que los últimos arrestados por la Ertzaintza en Ondarroa denunciaran torturas.

Esa operación comenzó con la detención, el 26 de enero, de Ibon Iparragirre, Asier Badiola, Xeber Uribe, Jabi Zubizarreta y Jon Iñaki Esnaola en localidades limítrofes de la costa entre Bizkaia y Gipuzkoa. En días posteriores fueron arrestados Urtza Alkorta, Zunbeltz Bedialauneta, Olaitz Lema e Igor Martín. Todos fueron encarcelados y al menos siete denunciaron amenazas, golpes y presiones por parte de la Ertzaintza. Cabe recordar que tres de ellos tuvieron que ser trasladados al hospital por fisuras en las costillas o contracturas musculares en el transcurso de la incomunicación.

La Consejería dirigida por Rodolfo Ares salió al paso pocos días después para «desmentir rotundamente» que los arrestados hubieran sufrido torturas o malos tratos. Ares apuntó incluso a la posibilidad de interponer denuncia ante esas acusaciones.

En la carta emitida por ERNE, los ertzainas denuncian que durante años ha sido el sindicato policial el que ha pagado los abogados en los casos más graves de «agresiones» y «denuncias falsas», mientras que en los casos más leves solicitaba a la Fiscalía que siguiera con el proceso. Según este sindicato, el descontento por la actitud del Departamento de Interior de no ejercer la acusación particular se remonta a hace más de diez años.

Incidente particular

El escrito se centra en una supuesta agresión sufrida por un agente de la Ertzaintza el pasado mes de setiembre en la capital vizcaina. Según ERNE, fue atacado por varias personas cuando se disponía a echar la basura y sufrió una fractura en una rodilla. ERNE denunciaba en la carta que el Departamento de Interior se había negado a ofrecer asesoría jurídica a este agente.

Por su parte, el Departamento de Interior no tardó en desmentir ese extremo y, al mismo tiempo, anunció que se personará como acusación particular en este caso y que también actuará así en todas las posibles ocasiones futuras.