Los familiares de José Asenjo Arenas, que falleció en febrero de 2008, han interpuesto una reclamación de indemnización por daños y perjuicios contra varias empresas del Puerto de Bilbao «por el incumplimiento empresarial de su obligación de protección de la salud de los trabajadores derivado de la exposición al amianto».

Las demandadas son Disa Ibérica, Feresa, la Sociedad de Estiba y Desestiba (Bilboestiba) y Naviera Peninsular, porque son las empresas donde trabajó José Asenjo, según consta en el informe realizado por Osalan, que reconoce que el mesotelioma pleural que le mató se debió al contacto con el amianto. Asenjo comenzó a trabajar con 14 años y falleció a los 58 años.

La demanda, a la vista de los informes oficiales, determina que las empresas del Puerto de Bilbo no adoptaron ninguna medida de seguridad para evitar el riesgo con el mineral cancerígeno.

Hace unos meses, ELA denunció que en las instalaciones del Puerto de Bilbo llega amianto y que manipula sin la suficientes medidas de seguridad y protección para los trabajadores.

Por otro lado, CCOO de Euskadi afirmó ayer que Osalan ha obligado a las empresas sucesoras de General Eléctrica Española (GEE) como son Bombardier, ABB Galindo y Alstom que informen de los trabajadores que estuvieron expuesto al amianto. Esta iniciativa se adopta por petición de CCOO tras el fallecimiento en noviembre pasado del trabajador L.G.S.

Denuncia en Bellota

LAB, por otro lado, presentó ayer una denuncia en la empresa Bellota de Legazpi debido a que el ciclón Xynthia provocó daños en la uralita de una nave de la empresa, que contiene amianto. La central sindical denunció que la dirección obligó al personal de una empresa subcontratada recoger los materiales dañados «sin protección alguna».

LAB recuerda que los residuos deben ser tratados de manera especial «y en este caso están apilados sin ningún control, pudiendo emitir las fibras cancerígenas al aire y contaminar a cualquier trabajador». Explica que «hemos tomado cartas en el asunto y ningún trabajador entrará en contacto con ese amianto». Pero se pregunta «¿ qué pasará en otras empresas con destrozos similares?».