La represión sigue dando vueltas de tuerca, los derechos de los presos y presas, privados de libertad y solamente eso, privados de libertad, el resto sobra; es decir, esa vulneración permanente y sistemática de sus derechos y los de sus familiares y amigos y amigas que está llegando a límites insospechados, chantajes miserables y cobardes llenos de odio y venganza, prolongación de las condenas, dispersión, un caldo de cultivo que acelera el exterminio, las trabas que permanentemente ponen a derechos tan elementales como el acceso a estudiar, controles sanitarios, visitas, condicionar negativamente la vida de los ex presos y ex presas después de salir una vez cumplida su condena...

Los responsable del alzamiento militar fascista del 36, con lo que ello supuso, los años de dictadura y los posteriores hasta nuestros días, BVE-GAL, los responsables de torturas, los de secuestros y desapariciones a ambos lados de la muga: Pertur, Popo Larre, Naparra, Jon Anza, por no remontarse a la época franquista... todos esos responsables de semejantes masacres, al margen de la impunidad y cobertura que han tenido para cometer esas atrocidades, se han ido de rositas y además no han tenido ni tienen ningún problema para vivir donde y como les da la gana, sin perjuicio de quién vive cerca o en el entorno.

No quiero que este escrito se entienda como algo revanchista o vengativo, nada más lejos de mi ánimo; sólo trato de situar y readecuar la realidad en sus justos términos para que nadie olvide lo que ha sido la historia de este país en las últimas décadas.

Señor Rubalcaba, Señor Ares, Señor Sanz y responsables del Gobierno francés: entiendo que alguien tendrá que cambiar el discurso y centrarlo dentro de las coordenadas que se precisan en las democracias para avanzar en un proceso que nos lleve hacia la solución del conflicto y poder abordar en profundidad y en mejores condiciones los problemas sociales y laborales, de convivencia... en definitiva, lo que la sociedad clama y necesita.

En el aspecto político, vemos que siguen manteniendo el bloqueo-apartheid hacia todo tipo de iniciativa democrática y legítima que después de muchos años la izquierda abertzale y diferentes partidos políticos, sindicatos, agentes sociales... están presentando para poder avanzar hacia otro escenario que nos permita poder dialogar, debatir y decidir, utilizando las herramientas imprescindibles que generan las democracias, y por eso digo que alguien tendrá que dar alguna explicación de esta negativa permanente en forma de represión y prisión.

Y en esta coyuntura tan confusa y que puede resultar de desorientación, nos encontramos con una nueva iniciativa que puede servir de brújula: Adierazi, que seguramente debe ir ampliándose y aglutinando diferentes sectores y agentes sociales en una travesía sin retorno, con más o menos obstáculos que irán poniendo aquellos que siguen teniendo nostalgia del franquismo y todavía se encuentran lejos de los parámetros de valores que giran en torno al eje democrático.

Debo añadir que, al margen de otras consideraciones, no debemos olvidar las palabras mágicas y, por tanto, imprescindibles: voluntad y dignidad, que nos deben acompañar en esta nueva singladura hacia ese nuevo escenario que tanto hemos soñado dentro y fuera de las prisiones y en medio de la galerna. SOS, stop a la ley de la fuerza.