Unas jornadas sobre la tortura fueron clausuradas ayer por la tarde en la Universidad de Sevilla utilizando como excusa que la presencia como ponente de la abogada de TAT, Ane Ituiño, no había sido comunicada a la Diputación de Sevilla cuando se solicitó la utilización del local. La Coordinadora de Prevención de la Tortura, que organizó el acto, lo desmiente además y asegura que sí había dado los nombres de los participantes.

Las jornadas comenzaron con normalidad por la mañana, pero por la tarde llegó el veto después de que el PP, blogs ultraderechistas y el periódico «El Mundo» pidieran que se prohibiera.

En declaraciones a GARA, Ituiño censuró que en el Estado español «molesta y no gusta» que se hable sobre la tortura. Las jornadas siguieron adelante en otro local.