El Seguros Bilbao logró el triplete el sábado en Ereño (Lehendakari Txapelketa) y la victoria fue para Illart Zuazubiskar, que certificó su buen inicio gracias a «la chispa» que le ha proporcionado competir en el velódromo durante el invierno.

El abadiñarra, de 20 años, es un ciclista corpulento y tiene velocidad. En la Challenge de Invierno ganó varias pruebas en Anoeta y fue cuarto en la prueba inaugural de Zumaia antes de vencer en Ereño.

El vizcaino nos confirma que empezó a entrenar y competir en pista durante el invierno «con el objetivo de entrenar». «Entrenaba en Berriz y competía en Anoeta», puntualiza. «Tenía sensaciones muy buenas y he comenzado con un buen punto de forma la temporada. La pista me ha dado una chispa que me ha venido bien».

Reconoce que ni muchos esperaban dominar y copar el podio en Ereño con Fraile y Domene y aclara que el orden de llegada lo determinó el director Xabier Artetxe desde el coche.

Cumple su segundo año en la categoría y en el Seguros Bilbao. Un equipo que eligió «visto que todos los años pasaban corredores a profesionales y por su buena imagen».

De sus compañeros destaca a Pardo y Cabedo, que son los que más experiencia acumulan, y de su quinta a Domene y López.

Formado en las categorías inferiores de Abadiño, en juveniles destacó con seis victorias en el Elorriaga Kirolak. En 2009 se quedó en blanco, aunque fue segundo en Plentzia y cuarto en Antzuola.

Pese a su físico, sólo piensa en labrarse un futuro en carretera, «por lo menos por ahora», aunque tampoco quiere cerrar la puerta a la pista.

Sufrir en la montaña

Se trata, sin duda, de un corredor fuerte, de 78 kilos (el año pasado 81), y por lo tanto con un importante margen de progresión. «Se que todavía tengo que pulir algunos kilos más; voy poco a poco y el equipo no me presiona en absoluto», asegura.

Supera la montaña a base de sufrir. «Me considero sobre todo un rodador y soy rápido, aunque no un sprinter porque no tengo su explosividad. Muchas veces tengo que buscar mis oportunidades desde lejos».

El Lehendakari es su torneo y no nota demasiado el cambio «porque se corre muy parecido a juveniles, a base de ataques y la fuerza es muy importante».

Su calendario se centrará en el Lekendakari, si bien destaca que es «pronto» para saber si podrá disputar la general. En cuanto a las vueltas, tiene programadas las de Araba, Valladolid, Palencia y Bizkaiko Bira.

Y aún tiene tiempo para cursar un módulo de Producción por Mecanizado en Iurreta.