Alrededor de treinta ertzainas comparecieron ayer en la Audiencia Nacional española en la segunda jornada del juicio que se lleva a cabo contra cuatro jóvenes de Barakaldo acusados de «quemar» un cajero y para quienes la Fiscalía solicita 33 años de cárcel.

En la vista de ayer el turno fue de los testigos presentados por la acusación, personada por la Fiscalía, por lo que declararon numerosos agentes de la Policía autonómica que participaron en los arrestos o en los registros de la viviendas, así como el ertzaina que dirigió la investigación contra estos cuatro jóvenes.

Dado que la sesión de hoy ha sido suspendida por el presidente de la sala, Javier Gómez Bermudez, el juicio proseguirá a primera hora de mañana con la toma de declaración de los testigos presentados por la defensa. Tras la intervención de estos llegará el turno para los peritos de ambas partes. Pese a que se prevé que sea mañana mismo cuando el juicio quede visto para sentencia, los abogados de la defensa alertaron a GARA de que es muy posible que el pleito se dilate alguna jornada más.

Mientras que los jóvenes son juzgados en Madrid, en Barakaldo se suceden las protestas en solidaridad con estos vecinos. Una manifestación recorrió a última hora de la tarde de ayer esta localidad de la margen izquierda.

Asimismo, para el viernes han organizado una jornada de lucha en el municipio. A las 13.00 han convocado una concentración ante el Juzgado y ya por la tarde, a las 20.00, una manifestación comarcal partirá desde la plaza Bide Onera de la localidad vizcaina.