El consejero de Interior del Gobierno de Lakua, Rodolfo Ares, anunció ayer que su Departamento remitirá a la Audiencia Nacional el atestado sobre la manifestación celebrada el domingo en Donostia para protestar por la muerte del militante de ETA Jon Anza, ya que considera que se profirieron expresiones que podrían ser «constitutivas de delito».

Ares afirmó que durante la marcha y, especialmente, cuando se dio lectura al manifiesto final, se profirieron gritos y expresiones que «son gravísimas acusaciones injuriosas contra administraciones, contra la Policía, contra el ministro de Interior» que «podrían ser constitutivas de delito».

Por esta causa, se ha decidido enviar el atestado elaborado por la Ertzaintza para que «se depuren las responsabilidades» que pudiera haber en relación a esta marcha y, «en concreto, con imputaciones no sólo al convocante de la manifestación, sino también a quien dio lectura al comunicado final», porque «entendemos que ha podido cometerse un delito tanto en el transcurso de la manifestación como en la lectura del documento final».

Entre los posibles delitos en los que se haya podido incurrir, el consejero citó los de «injurias, acusaciones falsas, homenaje a un miembro de ETA».

Además, anunció que se ha abierto al particular que comunicó la manifestación el correspondiente expediente administrativo por «vulnerar lo contenido en la Ley de Seguridad Ciudadana».

El consejero consideró «inaceptables e intolerables» las «acusaciones» realizadas tras la muerte de Anza contra la Policía y el ministro de Interior «sustentadas en suposiciones o versiones difundidas por ETA o por su entorno» que, según indicó, «sólo benefician a ETA». «No se puede tolerar que alguien acuse a gobiernos, a la Policía o al ministro de Interior de asesinos sin pruebas», manifestó.