La parlamentaria de Aralar, Aintzane Ezenarro, afirmó ayer que las fuerzas abertzales deberían «saber unir fuerzas en aquello que nos une», pero consideró que, teniendo en cuenta «los pasos» dados hasta ahora, «va a ser difícil» la celebración de un Aberri Eguna «unitario». Más allá de la convocatoria para el 4 de abril, la parlamentaria expresó que, a su entender, «no hace falta» que esta unión se «traslade» a una coalición electoral, porque aseguró que «es pronto» para abordar esta posibilidad y todavía prefiere dejar «las puertas abiertas». De cualquier modo, aseguró que, impulsando la unión entre fuerzas abertzales, «no se trata de enfrentar al frente españolista con otro frente», sino de «hacer frente a un frente españolista que se quiere prolongar a las diputaciones y a los ayuntamientos».

«No es suficiente»

En relación al llamamiento de la plataforma Independentistak para la celebración del Aberri Eguna, Ezenarro opinó que «no han sido las formas» y tampoco el contenido del documento «es suficiente». Se quejó de que se les planteó participar «una vez acordado y cerrado el texto», lo que, a su entender, no es «una forma de trabajar de forma conjunta entre diferentes». Destacó, también, que se debería «hacer desde el reconocimiento y el respeto mutuo».

En cuanto al texto suscrito, insistió en que «no es suficiente en este momento»; a su entender, «decir que «no estamos a las órdenes de ETA pero no admitimos que ETA sea una excusa para que no haya colaboración entre abertzales» es insuficiente e incomprensible». «ETA no es una excusa ¯prosiguió¯, es el obstáculo que impide una colaboración entre abertzales».

Así las cosas, Ezenarro consideró que «se ha hecho un proceso importante en el seno de Batasuna» y que «la mayoría está por cambiar de ciclo y dar por cerrado el ciclo de la violencia».