La Real quiere aprovechar la tercera oportunidad de eliminar a un rival directo en la lucha por el ascenso. Tras distanciar a Nástic y Numancia en los anteriores encuentros de Anoeta, los blanquiazules pueden alejar hoy al Levante a diez puntos y con el average al menos empatado tras el 1-0 de Valencia y dejar al Hércules a tres puntos y al Cartagena a siete después del empate del primero y perder ayer los murcianos.

Por contra una derrota comprimiría mucho la clasificación y dejaría al Levante a cuatro puntos y con el average a su favor. Son partidos de siete puntos y la clave está en asumir la presión de estos duelos tan valiosos. Aunque Gorka Larrea trasmite junto a estas líneas que es mayor para la Real, los jugadores realistas y sus aficionados deben pensar que quien más necesita el triunfo hoy es el Levante y no favorecer su estrategia, que se basa, como la de la Real, en guardar su portería sin conceder espacios a la espera de aprovechar alguna de sus oportunidades.

La Real supo manejar bien esta circunstancia ante Nástic y Numancia, y para buscar un nuevo triunfo Martín Lasarte introdujo ayer tres cambios con respecto a la última convocatoria al entrar Esnaola, Mikel González y Songo'o por Labaka, Sarasola y Nsue. Como el domingo anterior, las dudas se centran en saber si Zurutuza y Bueno entrarán en el once.

Un rival en racha

El Levante llega en su mejor momento en una demostración clara de que en Segunda un mismo equipo es completamente diferente en función de la racha que lleve. Despidió el 2009 con una serie de cinco partidos sin ganar -dos empates y tres derrotas- que le colocó en el puesto 13 a siete puntos del ascenso y tres del descenso y empezó esta jornada cuarto a tres puntos del ascenso y doce del descenso tras once sin perder, seis victorias y cinco empates. Destaca en su racha su seguridad defensiva, en seis no encajó ningún gol, en cuatro uno y sólo el Cádiz le metió dos y perdió 2-4. Por contra, mete pocos goles, salvo ese día y el 6-1 de la pasada semana al Nástic.