Cada hogar tendrá que pagar una media de 288,54 euros más al año si se repercute totalmente la subida del IVA en todas sus compras, según cálculos de la Organización de Consumidores y Usurarios (OCU) basados en la última encuesta sobre presupuestos familiares del INE.

Esos datos establecían en 31.953 euros el gasto medio anual en 2008, desagregado en varios grupos, a los que se ha podido atribuir el tipo de IVA que corresponde en cada caso.

La OCU asegura que, de esta manera, sus expertos han podido calcular de manera objetiva el efecto para el consumidor del incremento de ese impuesto desde el 1 de julio próximo, si los vendedores y proveedores de servicios decidieran aplicarlo íntegramente a los clientes.

Para el cálculo, se han tenido en cuenta los productos a los que se aplicará un 8% desde julio (IVA reducido) y a los que corresponderá el 18% (IVA general). La OCU aclara que los gastos en productos alimenticios básicos (pan, leche, huevos, quesos, frutas, verduras, hortalizas o legumbres) no sufren variación, ya que seguirán tributando al 4%.

Los componentes del gasto exentos de IVA, como los servicios médicos, alquiler de vivienda o educación, obviamente no sufrirán la subida del impuesto. La OCU afirma que habrá que esperar a julio para comprobar si la subida finalmente recae totalmente en el consumidor o si parte es asumida por algunos empresarios que prefieran mantener los precios de venta.

Automoción

El sector de la automoción también teme las consecuencias de la subida del IVA tras haberse beneficiado de un paréntesis de recuperación al calor de las ayudas públicas a la compra de coches y sus empresarios no parecen dispuestos a asumirla.

Así, el consejero delegado y director general de Peugeot-España, Rafael Prieto, señaló ayer que asumir la subida del IVA es llevar al sector a la quiebra técnica. Prieto, explicó que el impacto de la subida del IVA a partir del mes de julio en dos puntos y el término de las ayudas del Plan 2000E supondrán para el mercado una pérdida de 100.000 unidades.

Dijo no entender que se prefiera la recaudación de los dos puntos de incremento del IVA de 400.000 coches, cifra que se prevé para los últimos seis meses, lo que supone alrededor de 150 millones de euros, al 16% de IVA de los 100.000 vehículos que dejarán de venderse, cuyo importe se eleva a 320 millones de euros.

«No hay que poseer un máster para saber hacer las cuentas. En esto se equivocan -añadió- o hay una parte que no quieren contar».