Han sido cientos las voces que hasta ahora se han alzado en favor de una protección integral de Praileaitz y su ladera, y en contra del nuevo decreto que pretende modificar el Departamento de Cultura de Lakua liderado por la consejera Blanca Urgell. Han sido incesantes también las peticiones de diferentes asociaciones y movimientos ciudadanos, como es el caso de Praileaitzen Lagunak, Mutriku Natur Taldea o Praileaitz SOS, alertando de que, en contra de lo que defiende el Ejecutivo de Patxi López, la Ley de Costas no garantiza la total protección de la caverna situada en Deba y de la ladera que la bordea. Lakua asegura que la Ley de Costas defiende de forma suficiente la integridad de la cueva, mientras que los expertos se oponen a esta afirmación.

Al margen de este debate, la empresa Amenabar continúa explotando la cantera de Sasiola, en cuyo corazón se sitúa Praileaitz, una cueva que guarda valioso material arqueológico. Se supone que la Ley de Costas protege de forma íntegra la ladera de la caverna, prohibiendo cualquier actividad en esa zona. Miembros de las citadas asociaciones, sin embargo, han constatado en los últimos días que se han producido movimientos en el entorno que debería estar salvaguardado. Ayer alertaron de la existencia de una máquina perforadora en la zona oeste de la ladera, orientada hacia el barrio debatarra de Astigarribia, es decir, en un lugar donde estaría prohibido llevar a cabo cualquier trabajo. Cabe recordar que no es la primera vez que Amenabar introduce maquinaria en la ladera. Tal y como muestra el tercer punto de la imagen superior, hace unos meses instaló una planta de hormigón en un extremo de la ladera, invadiendo un terreno que debería estar exento de cualquier actividad.

Sin embargo, ésta no ha sido la única «irregularidad» captada por los miembros de estas asociaciones. También dieron cuenta de un «importante y peligroso», derrumbe muy cercano a la cueva (a unos cien metros) producido por los trabajos de explotación presuntamente sin autorización legal. «El citado derrumbe es muy reciente y con toda probabilidad ha sido debido a una voladura ejecutada in situ», dijeron.

Ayer por la tarde, dieron parte de lo ocurrido al guarda de costas y presentaron una denuncia en la comisaría de la Ertzaintza en Eibar. «Salvo que la empresa disponga de la debida autorización de la Agencia Vasca del Agua-URA, se van a exigir responsabilidades penales a quienes son los responsables de los trabajos y a quienes los autorizan o no los controlan», dijeron, para concluir que «mientras, en Gasteiz, los políticos siguen discutiendo por unos metros arriba o abajo».