NBA
Fuego cruzado en una noche de finales alternativas
Los enfrentamientos entre Denver y Orlando, por un lado, y San Antonio y Boston, por otro, protagonizaron la jornada de la madrugada del lunes.
Izkander FERNÁNDEZ
Nuevos ricos y viejos dinosaurios. O al menos, esos son los papeles que parecen encarnar Denver Nuggets, Orlando Magic, San Antonio Spurs y Boston Celtics. Las dos primeras franquicias como proyectos realizados con buen pulso, en torno a la figura de un jugador estrella, de un entrenador pausado y poco rígido en sus esquemas. Los dos segundos equipos como reflejo de lo que fueron y de lo que consiguieron. Arrastrando las edades y las lesiones de sus máximas estrellas y oliendo inevitablemente al inicio de un declive anunciado.
En el intercambio de golpes entre aspirantes con más o menos posibilidades de alcanzar las grandes finales de junio, Orlando se llevó el de las alternativas tangibles y San Antonio el de los cocos con historia.
Los Magic se impusieron a Denver en un partido igualado en el que el banquillo de los de Florida marcó las diferencias. Con Vince Carter fuera de juego a las primeras de cambio por lesión, JJ Redick y Ryan Anderson, con 22 y 19 puntos, tiraron del carro ganador.
El intercambio de canastas protagonizó un primer tiempo marcado por los ajustes y los reajustes defensivos sobre Carmelo Anthony y Dwight Howard. Con problemas para anotar con fluidez, tanto Orlando como Denver buscaron nuevas vías en sus respectivas segundas unidades. Así, Orlando encontró a Redick y a Anderson. Denver se tuvo que conformar con la aportación de JR Smith y Malik Allen, bien apoyados en el juego interior por Nene Hilario.
El segundo tiempo sirvió para que Denver presentase su candidatura al triunfo. Aceleró el paso, encontró a Anthony y frenó en seco a Howard. A falta de 7.35, los Nuggets alcanzaban los 10 puntos de ventaja, 67-57. Fin de la historia para los de Colorado.
Un tiempo muerto de Stan Van Gundy dejó las cosas claras a sus pupilos y la reacción fue cimentándose a lo largo de la segunda mitad del tercer cuarto. Otra vez Redick y Anderson volvieron a remar con fuerza y la diferencia menguó y desapareció cuando el reloj llegó a cero. Empate a 77 y un parcial de 20-10 para unos Magic que gozaban de inercia ganadora.
Pero dicha inercia tardó en imponerse. De entrada Orlando logró una renta de cinco puntos que casi resultó definitiva aunque Denver dio la cara hasta que quedaban cuatro minutos. Con 93-85 a favor de los Magic, Denver careció de plan b y los cañonazos de Carmelo o Chauncey Billups no tocaron aro.
Al final, en el duelo entre los aspirantes a todo con más futuro, Orlando demostró tener algo más pese a la lesión de Carter. En el Amway Arena, que registra más de cincuenta llenos consecutivos, se frotan las manos y se saben una de las alternativas más sólidas a Cavaliers y Lakers, los grandes favoritos.
Ginóbili, a lo grande
En el otro duelo de candidaturas, el de los atrofiados, fue el argentino Manu Ginóbili el que despejó la x de la ecuación inicial. Tras derrotar el sábado a Cleveland, los Spurs volvieron a demostrar su peligro de cara a los playoffs derrotando a unos desastrosos Celtics que naufragaron en el tiro con un 37% de acierto. El escolta argentino arrasó con 28 puntos y ayudó a su equipo a imponerse en el Garden por 94-73. En Boston sólo se salvó Pierce (18 tantos).
Va a ser complicado que Cleveland Cavaliers no se lleve el factor cancha que le posibilite jugar más partidos en casa en las series finales, ya que Los Angeles Lakers se encuentra a tres partidos y medio de los de LeBron, y Orlando Magic a seis.
Con la liga regular casi decantada para los Cavaliers de Cleveland, todo parece apuntar a que los 29.8 puntos, 7.2 rebotes y 8.6 asistencias por partido que está firmando LeBron James lo convertirán en el jugador más valioso de esta temporada.
Cleveland Cavaliers sigue impasible su curso en esta temporada regular. Llegan los traspiés pero los capitaneados por LeBron James siempre se levantan para dar un nuevo paso adelante. Tras su reciente derrota ante San Antonio Spurs, los Cavaliers volvían a jugar en casa con la particularidad emotiva marcada por la vuelta del pívot Zydrunas Ilgauskas. No es que su aportación sirviera de mucho, se quedó en cuatro puntos, pero el público del Quicken Loans Arena se hartó de aplaudir la vuelta a casa del gigante lituano. Ilgauskas fue traspasado a Washington Wizards en el intercambio de Antawn Jamison, pero la franquicia capitalina rompió su contrato y éste sólo quiso volver al único equipo en el que ha jugado en la NBA: Cleveland. Regresos lacrimógenos aparte, los Cavs se deshicieron de Sacramento Kings por 97-90 gracias a un gran partido de las dos principales referencias ofensivas de los de Ohio: LeBron anotó 34 puntos y Jamison 26. Por los Kings destacaron Carl Landry con 17, Beno Udrih con 18 y Andrés Nocioni con 21. Atlanta Hawks, otro de los favoritos, tampoco perdió el pulso a la competición superando a Indiana Pacers por 94-84.
I.F.
