Ya les había hablado en ocasión anterior de la existencia de una oficina siniestra desde la que se trata de aleccionar a los opinadores de la prensa para que calen las ideas de la doctrina oficial. Pero a algunos, con la cosa de las fiestas, les entra pereza y, en lugar de asimilar las ideas y redactar sus artículos, van y los copian directamente.

Les pasó ayer a Andrés Aberasturi, en «Diario de Ibiza» y al editorialista de «Diario de Navarra».

Lean a Aberasturi hablando de ETA: «Pretenden primero varios imposibles: la independencia de Euskadi con Navarra incluida y la anexión de las provincias vasco-francesas». Y al de «Diario de Navarra»: «Pretenden la independencia de Euskadi, Navarra incluida, más tres territorios vasco-franceses».

Otra vez Aberasturi: «Una vez logrado eso, mediante la violencia claro, se impondría una `democracia' socialista marxista en la que, como es natural, sólo sus afines tendrían cabida». Y el de «Diario de Navarra»: «Lograda la territorialidad, mediante la violencia cruenta, claro es, se impondría una democracia socialista-marxista en la que, como cae por su peso, sólo tendrían cabida sus afines».

Y es así todo el rato. Otro ejemplo. Dice Aberasturi: «La última barbaridad (por el hecho mismo y por donde se ha producido) ha sido el asesinato de un gendarme francés que naturalmente ETA ha empeorado aún más con unas explicaciones absolutamente impresentables en las que intenta no perder una `dignidad' que nunca ha tenido y a la vez trata de justificarse ante un Gobierno y un país que asumen, entre otras cosas, la cadena perpetua sin ningún rubor». Y le sigue «Diario de Navarra»: «La última barbaridad (por sí misma y por donde se ha producido) es el asesinato de un gendarme francés, que los terroristas han ensuciado con explicaciones impresentables para justificarse ante un Gobierno y un país que asumen sin el menor rubor ni reparo, entre otras cosas, la cadena perpetua».

Y la más bonita. Aberasturi: «Son muchos años para que aún queden políticos subidos en los guindos». Y el otro: «Van ya muchos años y demasiadas víctimas para que aún queden ilusos subidos en el guindo nacionalista». En la oficina siniestra meten horas extra.