Por fin, después de tantos años, doy de bruces con un artículo autocrítico por el tratamiento que da la prensa española a los asuntos vascos. Carlos López Fonseca, en «El Confidencial», reconocía que «la demoledora sentencia del caso Egunkaria, que ha concluido que el diario en euskera ni prestaba apoyo mediático a ETA ni era una fuente de financiación de la banda, obliga a reflexionar sobre el trabajo de los periodistas». Mira que bien.

Y es que, reconoce López Fonseca, «durante los siete años que ha durado la instrucción nos hemos limitado a trasladar a la opinión pública los autos del magistrado Del Olmo, dando como seguro lo que ahora se ha demostrado falso». Y nadie ha dicho ni pío para rectificar y pedir perdón a afectados y lectoras y lectores, claro.

Lo explica, además, muy clarito el columnista: «Tertulianos y periodistas de renombre alzaron su voz y su pluma para celebrar el desmantelamiento de un apéndice más de ETA cuando se cerró Egunkaria y se detuvo a sus dirigentes. Comentaristas de trazo grueso a los que ni escucharemos y leeremos ahora una rectificación».

Y a la lectura de tan equilibrado artículo siguió ayer el repaso a las informaciones referidas a la última redada de la Guardia Civil y la Audiencia Nacional en Euskal Herria. Ahí adquirió verdadera fuerza el artículo anterior. Lean, lean.

«El País»: «La Guardia Civil corta el nexo de unión entre ETA y sus presos».

«La Razón»: «Diez detenidos en un nuevo golpe de la Guardia Civil a la banda terrorista ETA».

«La Opinión»: «Diez detenidos por actuar de correos de ETA y ayudar a huir a terroristas».

«Heraldo de Aragón»: «Golpe al aparato de enlaces de ETA».

«El Norte de Castilla»: «Cae la red de abogados que usaba ETA para controlar las cárceles».

«La Gaceta»: «Golpe policial contra los abogados de ETA».

«Abc»: «Varapalo al entramado de abogados de ETA».

«La Voz de Galicia»: «Detenidos tres abogados por servir de enlaces entre ETA y los presos».

«La Gaceta»: «La Audiencia Nacional acaba con los enlaces entre ETA y sus presos».

«El Mundo»: «Detenidos los abogados que mantenían la línea dura de ETA entre los presos».

Y así en casi todos los medios.