Del mismo modo que toda persona necesita alimentarse -además de hidratarse- para sobrevivir, el Real Unión necesita vencer al Murcia en Gal para nutrir las esperanzas de permanencia. Así lo señalaba, al menos, el técnico Iñaki Alonso en la previa del vital encuentro.

Ahora sí que ya no le valen excusas al conjunto irundarra si quiere seguir una temporada más en Segunda. Penúltimo en la clasificación, siete puntos de desventaja con la permanencia, recibe a un un rival directo en casa... Son demasiados los alicientes para que la plantilla blanquinegra comience a despertar de una vez por todas de la terrorífica pesadilla en la que se encuentra.

Hace a penas dos días Juan Domínguez comentó que la plantilla «es digna de elogio» por la unión que hay en el vestuario, con un grupo comprometido y en la que reina el «buen ambiente dentro de la difícil situación». Su técnico afirmó ayer que tiene «un vestuario mágico», que mantiene «la ilusión» por mantener la categoría.

Y así es. Los dos están en lo cierto. Es posible que los jugadores que confeccionan el equipo no entren dentro de la revista estadounidense «Forbes» por ser los deportistas más ricos del planeta, pero tienen otras cualidades que en esta vida son más importantes. Por citar alguna de ellas, el compromiso.

Haciendo frente a las bajas

Aunque no siempre el fútbol es justo con los que trabajan para lograr su meta. Es hora de que el equilibrio del universo vuelva para darle una nueva oportunidad a este equipo que, por juego, no debe estar en el lugar en el que se encuentra. Si los unionistas siguen trabajando de la misma manera, la afición y los propios integrantes del club lograrán, al final, el objetivo.

De no vencer esta tarde, en cambio, el margen de error se quedaría prácticamente en cero, aunque matemáticamente aún se podría lograr la permanencia.

Las ausencias del cuadro guipuzcoano son muy notables, con seis lesionados y un sancionado, pero el equipo ya se las ha ingeniado en partidos anteriores para sacar algo positivo ante las adversidades. Así, Domínguez y Abasolo podrían volver al once y Jauregi sería el encargado de proteger la portería.

En el Murcia, volverá a la convocatoria Iñaki Bea, que podría aportar competitividad, agresividad y espíritu defensivo.